El viernes comienza la presentación de los alegatos orales en la Corte Internacional de Justicia (CIJ). Chile demandó a Bolivia por las aguas del Silala. Los representantes bolivianos insisten en que esa aguas nacen en territorio nacional

30 de marzo de 2022, 4:00 AM
30 de marzo de 2022, 4:00 AM


Cautela en el frente boliviano. El canciller Rogelio Mayta viajará este miércoles a La Haya, la sede de la Corte Internacional de Justicia (CIJ). Desde este viernes se desarrollarán allí los alegatos orales del juicio planteado por Chile que debe definir la naturaleza de las aguas del Silala. En el país no habrá ningún acto especial, al contrario de lo ocurrido en octubre de 2018, cuando había optimismo por la demanda marítima.

“El miércoles por la madrugada, una parte del Órgano Ejecutivo, en este caso la Cancillería, ya estará en camino para La Haya. Vamos a poder acompañar y esperemos que nos vaya muy bien. No podemos dar mayores de detalles por la seguridad del Estado”, informó el presidente de la Cámara de Diputados, Freddy Mamani (MAS), que representará al Legislativo en el inicio de los alegatos orales que se prologarán hasta el próximo 14 de abril. El proceso será prolongado por las presentaciones de los equipos científicos de cada país.

Mamani precisó que asistirá a la presentación del 1 de abril, que corresponde a la demanda de Chile y a la respuesta que dará Bolivia el lunes 4 de abril en el salón principal del Palacio de la Paz, la sede de la CIJ, el principal tribunal internacional de la Organización de Naciones Unidas (ONU). “No vamos a quedarnos todo el tiempo. Estaremos esos dos días”, dijo.

La Cancillería invitó también al presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, pero esa autoridad declinó de viajar. Aseguró que confía en la “solidez” de los argumentos bolivianos en el litigio y ratificó la demanda nacional de acceder a una compensación por el usufructo de esos recursos.

Pero el clima de opinión es distinto al proceso de alegatos que se dio con la demanda marítima, cuando el gobierno de Evo Morales promovió vigilias y desfiles para mostrar el interés del país respecto a la decisión de la CIJ.

El senador Rodrigo Paz, de la alianza opositora Comunidad Ciudadana (CC), consideró que los pronósticos son malos. Lamentó la poca apertura de la Cancillería para dar a conocer los detalles del proceso y advirtió que el país puede “perder soberanía”.

“Un resultado posible es que se declare al Silala como recurso compartido de agua. Esto significa que será una pérdida de soberanía, porque lo que era nuestro, ahora pasará a ser compartido. Perdimos soberanía negociada del mar en La Haya y ahora estamos perdiendo el Silala”, opinó.

Chile demandó a Bolivia el 6 de junio de 2016 ante la CIJ. Pidió al tribunal de la ONU que declare al Silala “un río internacional” y que tiene derecho al uso de sus aguas.
En 2018, Bolivia respondió y presentó una contrademanda. Pidió a la Corte que reconozca la soberanía del país “sobre los canales artificiales y el cauce” generado por las aguas del Silala y una “compensación” que debería ser pagada por Chile sobre la base de las cláusulas de un acuerdo.

La vicecanciller de Chile, Ximena Fuentes, insistió ayer en “compartir” las aguas. En su cuenta en Twitter mostró una foto de la frontera y señaló que hay “una quebrada, labrada durante miles de años, por la que fluye el agua hasta Chile”. Apuntó que “puede ser usado por ambos Estados”.

Esas aguas se usaban para alimentar antiguas locomotoras a vapor de la empresa anglo chilena Bolivian Antofagasta Railway. El economista Milton Lérida, quien realizó varios estudios sobre el Silala, consideró que aceptar este juicio fue “un error”, porque tiene que ver con un acuerdo firmado con una empresa y no con Chile.


Tags