Miles de consumidores han firmado un compromiso de no pagar sus facturas de gas y electricidad en otoño si no se hace nada para atajar la dramática subida de precios.

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16 de agosto de 2022, 9:33 AM
16 de agosto de 2022, 9:33 AM

Un movimiento de desobediencia civil está cobrando impulso en el Reino Unido. Miles de consumidores han firmado un compromiso de no pagar sus facturas de gas y electricidad en otoño (boreal) si no se hace nada para atajar la dramática subida de precios.

Ya sea por principios, por falta de recursos, para denunciar la injusticia que han sufrido o en previsión de que se encuentre una solución, la participación en la campaña "No pagues" está en pleno apogeo. Más de 107.000 personas planean cancelar sus débitos automáticos para protestar contra la subida de los precios de la energía.

Por un lado, las organizaciones caritativas están preocupadas por la posibilidad de un fuerte endeudamiento, ya que la pobreza energética podría duplicarse hasta alcanzar los 12 millones de hogares. Por otro lado, Ofgem, el organismo regulador de la energía, advierte del riesgo de que le corten el gas y la electricidad.

La mayor inflación desde hace más de cuatro décadas

Se prevé que en otoño las facturas aumenten a unos 3.500 euros (4.200 euros) al año para el hogar medio. Esto supone un aumento del 300% respecto al pasado mes de octubre. En enero, las facturas podrían alcanzar las 5.000 libras esterlinas o casi 6.000 euros. Se trata de la mayor inflación en el Reino Unido desde hace más de 40 años.

El ex primer ministro Gordon Brown ha publicado un artículo de opinión en The Guardian, en el que pide que las empresas energéticas que no puedan bajar sus tarifas vuelvan temporalmente al servicio público.