El presidente ucraniano Volodimir Zelenski inaugura la Berlinale
Varias estrellas internacionales estuvieron presentes, entre ellas la actriz estadounidense Kristen Stewart, que preside el jurado de la Berlinale. Pero fue el Presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, el centro de la velada.
La 73 edición del Festival Internacional de Cine de Berlín fue inaugurada el jueves por la noche. A lo largo de diez días se proyectarán unas 300 películas, 19 de ellas en competición por el prestigioso Oso de Oro.
Anne Hathaway, Kristen Stewart, Golshifteh Farahani o Peter Dinklage: las estrellas animaron la alfombra roja del Berlinale Palast... Pero el que puso en pie a toda la sala fue otro actor convertido en líder de un país en guerra.
El presidente Volodimir Zelenski compareció por video desde su despacho en la capital ucraniana. "Por supuesto, el cine no puede cambiar el mundo. Pero puede influir e inspirar a quienes pueden cambiar el mundo", dijo el presidente.
“Rusia quiere construir el mismo tipo de muro en Ucrania. Un muro entre nosotros y Europa, para que Ucrania no pueda tomar sus propias decisiones. Un muro entre la libertad y la esclavitud, entre el derecho a vivir y los ataques con misiles, entre el progreso y las ruinas que Rusia deja tras de sí. Un muro entre la civilización y la tiranía”, subrayó.
“Hoy, Ucrania es la fortaleza del mundo libre. Una fortaleza que resiste desde hace casi un año, una fortaleza que lucha por su supervivencia, pero también por Europa y el mundo, una fortaleza que no debe caer y que se mantendrá firme hasta el final. Venceremos, y sé que estarán convencidos de ello cuando hayan visto la película Superpotencia, la superpotencia de Ucrania. Gloria a Ucrania”, concluyó.
Volodimir Zelenski, que también había intervenido en las ceremonias de apertura de los festivales de Cannes y Venecia, tenía un motivo especial para aparecer en Berlín: la presentación fuera de concurso del documental Superpower, dirigido por Sean Penn. El director estadounidense se encontraba en Ucrania el 24 de febrero de 2022, el día de la invasión rusa. "En un principio, la película pretendía mostrar cómo un actor cómico se convierte en presidente. Pero de repente se convirtió en algo muy diferente", sostuvo.
Sean Penn, visiblemente emocionado, llevaba en la solapa una insignia azul y amarilla, los colores de Ucrania. Los colores que también adornan este año el oso de la Berlinale. Un festival que, en consonancia con su propio ADN político, también celebra la lucha del pueblo iraní.
