Rusia denuncia un ‘sabotaje’ ucraniano por la explosión de municiones en Crimea
Una central eléctrica, una línea de alta tensión, una vía férrea y varias casas también resultaron dañadas. El incendio se produjo en un depósito de municiones
En la madrugada del martes 16 de agosto se produjo un nuevo incidente en una base rusa en Crimea. Moscú denuncia un sabotaje. Muchas infraestructuras se vieron afectadas.
Una central eléctrica, una línea de alta tensión, una vía férrea y varias casas resultaron dañadas esta mañana, alrededor de las 6:00 horas locales. Las autoridades rusas hablan ahora de sabotaje, después de haber mencionado un incendio accidental. Según el Ministerio de Defensa de Rusia, el incendio se produjo en un depósito de municiones en un pueblo situado a unos diez kilómetros de Djankoi, la capital del distrito homónimo en el norte de la península de Crimea.
Las explosiones posteriores duraron varias horas, según el gobernador de Crimea, que acudió al lugar de los hechos. Dos personas resultaron heridas, según la misma fuente, y las autoridades procedieron a la evacuación. En Internet circulan videos de transformadores eléctricos en llamas.
Línea ferroviaria afectada
La línea de ferrocarril también se vio afectada. El Ministerio de Transportes de Crimea ha anunciado la introducción de autobuses de sustitución en un tramo hacia el estrecho de Kerch. Las explosiones no fueron accidentales. El "minucioso trabajo de las fuerzas armadas ucranianas continuará hasta la completa desocupación de los territorios ucranianos", dijo un funcionario.
Los lanzacohetes múltiples móviles entregados recientemente a Ucrania le permiten ahora atacar con precisión a 80 kilómetros. Kiev se ha comprometido a no utilizarlos en Rusia. "Crimea es Ucrania", dijo en Telegram el jefe de la administración presidencial ucraniana, Andrey Iermak.
La semana pasada, las instalaciones rusas ya sufrieron daños en la base militar de Saki, en el sur de la península, tras un incendio y explosiones, según las autoridades de Crimea. Estas explosiones han degradado significativamente la capacidad aérea de la flota rusa del Mar Negro, según el Ministerio de Defensa del Reino Unido.
