Testimonios de manifestantes iraníes: ‘Estoy segura que Mahsa también recibió golpes’
Mahsa Amini, de 22 años, murió después de ser detenida por la Policía de la Moral, por llevar mal puesto el velo
El bulevar Keshavard, en el centro de Teherán, fue el lunes escenario de enfrentamientos entre los servicios de seguridad de la Revolución Islámica que reprimía con violencia la protesta de miles de jóvenes, mujeres y hombres, que salieron a condenar lo que ellos consideran el asesinato de Mahsa Amini, de 22 años. RFI conversó en Teherán con mujeres que participaron en la manifestación.
Por la corresponsal de RFI en Teherán
Mujeres cubiertas con el estricto chador se cruzan con otras que llevan su gabardina más colorida o más abierta. E incluso hay quienes caminan sin velo y con el pelo pintado de azul, como Farideh, una diseñadora grafica de de 40 años.
“A mí me han detenido varias veces y me han llevado a la comisaria de Bozará, incluso cuando tenía mi cabeza cubierta con el velo… Pero querían arrestarme”, cuenta a RFI.
Decenas de mujeres como Farideh son detenidas por la llamada Policía de la Moral diariamente en las grandes ciudades de Irán, especialmente en Teherán, donde son llevadas a una comisaria conocida como Vozará.
Oficialmente las detienen para darles un curso reeducación donde les hacen prometer que se vestirán según las reglas estrictas islámicas, pero mujeres como Farideh denuncian los excesos de esta fuerza policial.
“He sido testigo de cómo pegaban a las mujeres. No dentro de la camioneta sino en la misma comisaria. Fui testigo de cómo pegaban a mujeres que preguntaban por qué las habían llevado hasta allí. Mujeres que solo preguntaban por qué las arrestaban. Estoy segura que Mahsa también recibió golpes”, afirma Farideh.
Imágenes de manifestantes protestando contra el régimen iraní en Teherán.
Por más de cuatro décadas, la República Islámica ha logrado reprimir las protestas de quienes se oponen a la imposición del velo. Pero esta nueva generación parece más determinada a luchar por sus libertades, como se ha visto desde la muerte de Mahsa Amini…
“Nuestras indignaciones han encontrado un lugar común y nuestra rabia ha explotado repentinamente. Al igual que nuestro deseo de hacer algo”, explica Pegah, arquitecta de 23 años.
Por el momento las marchas continúan. Este martes hay una nueva programada en Teherán
