Algunas veces es por falta de higiene, otras por patologías o herencia. Conozca las soluciones

16 de febrero de 2023, 8:56 AM
16 de febrero de 2023, 8:56 AM

Las antiestéticas manchas en los dientes suelen aparecer por una deficiente higiene bucal, pero pueden deberse a otras causas. Toma nota de cómo prevenirlas y las técnicas empleadas por los dentistas para que desaparezcan.

Manchas en los dientes: causas y tipos

Una bonita sonrisa es nuestra mejor carta de presentación, pero por muy expresiva que sea puede verse empañada si nuestros dientes no están sanos. No se trata de tener una dentadura deslumbrante como la de las estrellas de Hollywood, sino de que luzca limpia y saludable. Porque si algo puede fastidiar ese bonito gesto que expresa simpatía y felicidad son precisamente las manchas en los dientes. Un problema con solución que no debemos tapar.

Disfrutar de una boca sana y libre de máculas depende generalmente de uno mismo, porque en la mayor parte de los casos las manchas en los dientes se deben a una deficiente higiene bucal, o a que no tenemos el hábito de lavarnos los dientes varias veces al día y esto provoca la acumulación de restos de comida y la aparición de sarro, bacterias u otras sustancias, que dan origen a tintes de diversa coloración.

Sin embargo, también hay personas que aun llevando a cabo buenos hábitos de higiene bucal, desarrollan manchas en sus dientes a causa de factores externos, como pueden ser traumatismos, consumo de medicamentos, deterioro del esmalte, problemas heredados de la infancia, o diferentes patologías.

 Productos y situaciones que manchan tus dientes

Las manchas en los dientes aparecen por diferentes causas, unas relacionadas con los hábitos de consumo, y otras por motivos ajenos y que no siempre es posible prevenir, sin embargo, en aquello que dependa de ti, te recomendamos evitar lo siguiente:

 Alimentos y bebidas

Diversos alimentos pueden manchar tus dientes, como aquellos con colorantes, frutas y verduras con colores intensos, dulces, café, vino, té o refrescos, manchan tus dientes. No se trata de eliminarlos completamente de tu dieta, pero sí de que no abuses de ellos y te cepilles los dientes después de consumirlos.

Tabaco y alcohol

La nicotina del tabaco y los azucares del alcohol perjudicarán también tu dentadura. Dejar de consumirlos te ayudará a tener unos dientes sin manchas y, además, tu salud te lo agradecerá.

Bruxismo

Es el hábito inconsciente de apretar la mandíbula o rechinar los dientes, desgastándolos y deteriorando su esmalte. Con una férula de descarga rígida se pueden solucionar los efectos de este problema.

 Traumatismos

Los golpes en la cara pueden afectar a la estructura de los dientes y dar lugar a manchas internas.

 Abuso de enjuagues

Estos complementos bucales contienen clorhexidina, que es una sustancia desinfectante contra las bacterias que puede marcar los dientes si se utiliza de manera prolongada.

Tipos de manchas

No todas las manchas en los dientes son iguales; existen diferentes tipos que se asocian a causas muy diversas. La forma, el espesor y el color de esas máculas nos darán pistas sobre su origen y su posible solución, aunque la respuesta autorizada siempre la debe proporcionar el dentista.

Las diferentes variedades de manchas en los dientes se pueden agrupar en dos tipos: extrínsecas e intrínsecas. Las manchas dentales extrínsecas se encuentran en la superficie de la dentadura y se manifiestan como marcas o como una acumulación de sustancias. Por lo general son más fáciles de eliminar que las intrínsecas, y en algunos casos bastará con un cepillado frecuente.

En las extrínsecas están incluidas las manchas que surgen por la acumulación de restos de comida o de bacterias. Habitualmente toman una tonalidad marrón o blanquecina, y pueden cubrir todo el diente o formar depósitos en la región donde comienza la encía.

Las manchas dentales intrínsecas aparecen en el esmalte o la dentina (una capa de marfil dentro del diente) y su diagnóstico suele ser más complejo. Esta clase de manchas pueden ser consecuencia de algún problema en la estructura del diente, del consumo de ciertos medicamentos, de una mala formación de las piezas dentales desde la infancia o de enfermedades dentales.