Someterse a estudios preventivos ayuda detectar anomalías y a iniciar tratamientos oportunos para curar el cáncer

25 de mayo de 2023, 16:53 PM
25 de mayo de 2023, 16:53 PM

Una vez al año, las mujeres mayores de 40 años deben realizarse una mamografía, así como las mayores de 30, un Papanicolau (PAP) para controlar su salud y propiciar diagnósticos tempranos de enfermedades como el cáncer de mama o el de cuello uterino.

La Organización Mundial de la Salud señala que cada año 491 mil mujeres son diagnosticadas con cáncer de mama en las Américas. Del mismo modo, indica que este es el tipo de cáncer más frecuente y la causa más común de muerte por cáncer de mujeres en el mundo.

El cáncer de cuello uterino, de acuerdo con la OMS, es el cuarto tipo de cáncer más frecuente en las mujeres de todo el mundo, con una incidencia estimada de 604 mil nuevos casos y 342 mil muertes en 2020.

CUIDADOS PREVENTIVOS

La ginecóloga Iblin Moscoso, del Cies, manifiesta que en Santa Cruz aún no existe una cultura de controles preventivos y que la mayoría de las pacientes acude a la consulta cuando presenta molestias o dolor.

Aunque la vergüenza ya no es un factor preponderante a la hora de realizarse los exámenes, como lo era hace algunas décadas, las mujeres refieren miedo a sentir dolor o resquemor por el respeto a su privacidad, señala Moscoso. En este último punto, indica que es más común en las provincias, pues pese a contar con centros médicos, prefieren hacerse los exámenes por la vía privada, si hay campañas de detección, para evitar que otras personas del lugar se enteren que acudieron al médico para una revisión.

En la ciudad, someterse a un Papanicolau o a una captura híbrida, lo mismo que a una mamografía, suele estar asociado al dolor.

PREVENCIÓN DEL CÁNCER CERVICAL

Moscoso explica que al momento del Papanicolau o de la captura híbrida, la paciente puede llegar a sentir quizás una molestia, al momento en que un cepillo toma la muestra celular del cuello uterino. Reconoce que depende mucho de la técnica de quien toma la muestra y que, una experiencia negativa, puede condicionar el que la paciente rehúya de posteriores exámenes.

La muestra de las células del cuello útero se toma usando una espátula, o un cepillo durante un examen ginecológico. Estas se envían a un laboratorio para ser procesadas. En este análisis se determinará si las células son normales o si existe algún cambio. Es la prueba más frecuente para detectar el cáncer de cuello uterino y está disponible en el sistema de salud pública de manera gratuita. También se puede acceder de manera privada. Para someterse a esta prueba, la paciente debe estar libre de infecciones y no debe estar menstruando.

Moscoso detalla que, en algunos casos, el resultado de este análisis puede ser negativo; pero, de todas formas, la paciente puede tener el virus del papiloma humano (HPV) -que causa ese tipo de cáncer-, por lo que una captura híbrida será una excelente opción para detectarlo.

La captura híbrida busca células cancerígenas en el ADN de las células del cuello del útero, en el laboratorio, y las detecta incluso antes de que produzcan lesiones. La muestra se toma igual que la del Papanicolau.



El cáncer de cuello uterino puede prevenirse con chequeos médicos anuales/Freepick



La ginecóloga señala que, si la captura híbrida sale negativa, el siguiente examen puede repetirse pasados tres años. En cambio, si es positiva, pero el Papanicolau es negativo, la prueba deberá repetirse después de 18 meses. En ese tiempo se verificará su permanencia para iniciar un tratamiento, en el caso de que persista y no hubiera sido eliminado.

Otro de los análisis que ayudan en la detección del cáncer cervical es la colposcopía, que permite ver lesiones y dónde se encuentran. En esta inspección visual se usa ácido acético, que es el que ayuda a identificar las lesiones, dado que las anormalidades se pondrán de color blanco al contacto con el líquido, explica Moscoso.

Para las niñas y adolescentes, la mejor prevención del cáncer cervical o de cuello uterino es la vacuna contra el virus del papiloma humano (HPV), que es el causante más frecuente de este tipo de cáncer. Moscoso anima a las madres a llevar a inmunizar a sus hijas para prevenir en más del 80% esta enfermedad, durante su vida adulta. La vacuna es gratuita y se encuentra en el esquema nacional de inmunización.

DETECCIÓN DEL CÁNCER DE MAMA

En el caso de la mamografía, la ginecóloga sostiene que los aparatos modernos, que son digitales, no provocan tanta molestia; pero también señala que sentir esa molestia por unos cinco minutos puede hacer la diferencia, si se detectan células cancerígenas.

Para las menores de 40 años existe la opción de la ecografía mamaria, pero para quienes superan las cuatro décadas, la alternativa es la mamografía, que debe hacerse cada año, haya o no molestias.

Moscoso recomienda la autoexploración de las mamas para detectar bultos, alteraciones en la piel o en los pezones. Señala que este autoexamen se puede hacer en casa y es necesario que la menstruación haya terminado.

Para una correcta autoexploración, la paciente puede pedir la guía a su médico.



Chequeos médicos para prevenir el cáncer en la mujer/Freepick



Según las estadísticas del Sedes, el 80% de las mujeres que llegan a los centros médicos con cáncer están en un estado muy avanzado, lo que trae como consecuencia tratamientos muy agresivos, que ponen en riesgo sus vidas.

Existen mamógrafos en los diferentes hospitales de segundo nivel, en el municipio cruceño, donde pueden agendarse análisis de manera gratuita.

CAMPAÑAS

Diferentes centros médicos aprovechan meses como marzo, mayo y octubre para promover campañas de detección temprana del cáncer en las mujeres. Moscoso indica que es una buena opción, no solo porque los precios de los exámenes se hacen más accesibles, sino porque sirven de recordatorio -sobre todo para las más despistadas- de que ha llegado el tiempo para hacerse un nuevo control.

En el mes de las madres, la médica anima a las mujeres a realizarse los estudios que permitan verificar su estado de salud.