Alcalde llama a unir esfuerzos para construir la gran metrópolis; resalta ausencia de autoridades nacionales y departamentales

Con un mensaje de unidad, tolerancia y apertura, el alcalde Jhonny Fernández felicitó a Santa Cruz de la Sierra en la Sesión de Honor, organizada por el Concejo Municipal, en ocasión de los 461 años de fundación de la ciudad. Indicó que es hora de homenajear a la ciudad en la práctica y no con discursos.

“Hemos entendido que en la diversidad de pensamiento ideológico y político se puede unir esfuerzos en programas y proyectos de desarrollo de la construcción de una nueva ciudad. Ya no en la ciudad de los anillos, sino en una gran metrópolis”, manifestó el burgomaestre.

Durante su discurso hizo alusión a las poblaciones migrantes tanto del interior, como del exterior del país e hizo un llamado para el respeto y el trabajo conjunto. También destacó la presencia y la actividad de comerciantes y transportistas.

Fernández concibe a Santa Cruz como una ciudad próspera que “alberga a todos como hermanos” y que deben escucharse para encontrar que estos colectivos buscan contribuir al desarrollo de la urbe.

“Se acabó esa actitud dictatorial y mezquina que, lo único que nos trajo, fue improvisación, malgasto y corrupción; eso es lo que no queremos que se vuelva a repetir”, expresó en alusión a las anteriores gestiones municipales que, a su juicio, dejaron muchas cosas pendientes por hacer en la ciudad.

Jhonny describe al habitante de Santa Cruz de la Sierra como: soñador, emprendedor, innovador, talentoso, conocedor y experimentado, por lo que le pide que esas características sean puestas al servicio de todos: “No seamos mezquinos”, repitió.

El alcalde echó en falta la presencia de las autoridades nacionales y departamentales en el acto protocolar, lo que calificó como una falta de respeto: “¡Es el aniversario de Santa Cruz, no de un partido político, de una persona, del alcalde o de un concejal!”, afirmó airado.

Las primeras filas del público estaban ocupadas por concejales que no se encontraban en la testera y secretarios municipales y asambleístas, además del vicario general de la Arquidiócesis de Santa Cruz. No se vio al Gobernador ni al Presidente del Estado.

“Nuestro compromiso es cumplir con esa tarea que nos encomendaron: Ser leal, consecuente con nuestro pueblo; emprendedores, de trabajo, honesto… para dar ejemplo de vida a esta y las nuevas generaciones que vendrán”, enunció.

Durante la velada se entregaron 13 medallas al Mérito Municipal, además de La Cruz de la Orden del Capitán Ñuflo de Chaves, con la que fue distinguida como Hija Ilustre la historiadora e investigadora cruceña Paula Peña. También fue ella la responsable de llevar a los asistentes en un viaje en el tiempo con la reseña histórica sobre los orígenes de Santa Cruz de la Sierra

Entre los distinguidos de este año se encuentran los líderes cívicos Rómulo Calvo y Fernando Castedo, quienes recibieron la medalla al Mérito Municipal en las categorías de Salud y Profesional, respectivamente. Ambos profesionales de la salud que fueron apartados de sus fuentes laborales en la Caja de Salud, y cuyos casos incluso han sido llevados a los estrados judiciales, justo después del paro cívico de noviembre pasado.