En 2017, hasta agosto, se habían contratado 58 obras y solo una de ellas costaba casi el doble de lo comprometido para lo que va de 2018. En 2016 fueron más de 80 obras

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4 de septiembre de 2018, 16:00 PM
4 de septiembre de 2018, 16:00 PM

La web del Sistema de Contrataciones Estatales (Sicoes) arroja un balance de baja ejecución presupuestaria en obras para la Alcaldía municipal de Santa Cruz de la Sierra. Tras ocho meses de gestión, el capítulo de obras -buscado según la ‘fecha de publicación’, para aislar los programas del POA 2018- registra 14 intenciones de contratos, con dos de ellas anuladas y dos sin adjudicar (Bs 2,2 millones). Así, en lo que va del año, la comuna cruceña ha contratado obras por Bs 30,51 millones, lo que equivale a menos del 1% del presupuesto de 2018, cifrado en Bs 3.776 millones, a pesar de que el año pasado se anunció que el 80% del mismo iría a inversión en obras.

Esto no quiere decir que la Alcaldía esté detenida. Según contó Sandra Velarde, secretaria de Finanzas, hace cuatro semanas la ejecución presupuestaria había llegado al 50% y los ingresos, al 55%. El Sicoes cuenta que el municipio local ha enviado reportes de 207 contratos en la adquisición de bienes (compra de tóneres, gasolina, muebles, uniformes, insumos para hospitales, etc.), casi 300 contratos de servicios generales (mantenimiento del sistema informático, organización de eventos para el Concejo y el Ejecutivo, etc.), casi 70 servicios de consultorías, pero solo 10 contratos de obras por el equivalente al 0,81% del POA del año en curso.

Un año lento

Los dos años anteriores fueron más movidos para la administración municipal, en cuanto a obras se refiere. Según el Sicoes, en los mismos ocho meses de 2017 se habían contratado ya 58 obras. Solo una de ellas, la pavimentación de un tramo de la avenida Santos Dumont, entre la entrada a Los Lotes y la Refinería, había demandado una inversión de Bs 57,76 millones, casi el doble de lo ejecutado en obras en lo que va de 2018. En 2016, los primeros ocho meses del año fueron aún más frenéticos, y al 31 de agosto se habían reportado 88 obras, entre ellas la refacción de los caminos vecinales de varios distritos, la construcción de portales para la cumbre del G-77 o la refacción del piso del edificio central.

La explicación

Hay dos motivos para explicar el nuevo ritmo en la contratación de obras. Según explicaron las arquitectas Sandra Velarde, secretaria de Administración y Finanzas, y Angélica Sosa, presidenta del Concejo, en una entrevista conjunta, tiene que ver con los cambios de estructura y las prioridades de la Alcaldía. Velarde explicó que el proceso de achicamiento de las secretarías ha hecho que la contratación de obras se concentre básicamente en dos carteras: la de Obras Públicas y la de Parques y Jardines y Obras de Equipamiento Social. Eso hace que el resto deba adecuar su trabajo a esta disposición. Velarde explicó que esto se plasmará en una reformulación del Programa Anual de Actividades de 2018, que será enviado al Concejo. Según el concejal Johnny Fernández (UCS), ni el nuevo POA de este año ni la nueva estructura municipal han pasado por el órgano deliberante. Meses atrás llegó al Concejo una reprogramación presupuestaria de Bs 90 millones, destinada básicamente a recortar obras pequeñas para los fondos a otras necesidades, como la expropiación de terrenos y pago de servicios médicos.

La presidenta del Concejo aseguró que no se está ahorrando dinero para nada y que los grandes desafíos plasmados en el POA de 2018 serán cumplidos.

En ese sentido, anunció que en las siguientes semanas se licitarán las estaciones de transferencia del sur, norte y este, un sistema articulado de buses para el primer anillo, paradas cada 500 metros en las mismas avenidas y “un plan gigante de ciclovías”. Todo eso es parte del plan de movilidad urbana que aún está siendo pulido -según comentó Velarde- por expertos.

Ecos

A Tito Sanjinés, concejal del MAS, la noticia lo tomó por sorpresa. No creía que menos del 1% del presupuesto de este año se había contratado en obras. “Si es así, no se estaría cumpliendo con el porcentaje de ejecución del POA”, consideró el edil masista. Anunció que esta semana pedirá un informe sobre este tema y consideró que puede afectar al POA de 2019, pese a que ya fue aprobado.

José Antonio Prado, miembro del Cedure (Centro de Estudios para el Desarrollo Urbano y Regional) y Revolución Jigote, ha estudiado los tomos presentados como parte de un plan de movilidad urbana entregado a los transportistas y critica lo que él ve como secretismo para el manejo de esta política municipal. Lamenta que no sea fruto de un proceso secuencial de planificación participativa y apunta que se puede cometer el mismo error que la “duplicación de los mercados”, cuando el municipio no dio a conocer su “plan de mercados”. Lamenta, además, que ahora se hable de obras relacionadas con el plan de movilidad y de un sistema de buses BRT sin responder las preguntas principales: “¿Cuál es el sistema de administración y de gestión de dicho plan? ¿Por qué no se ha presentado a la sociedad civil de forma transparente ese plan de movilidad urbana? Como siempre, cuando la gente tenga al fin los insumos suficientes para opinar, ya será tarde, y quien se atreva a reclamar será enemigo del progreso”, reclamó Prado.

El concejal Fernández no se mostró extrañado por la falta de contratación de obras. Lo achaca al “caos y al desorden generado al tratar de instaurar la nueva estructura de las secretarías”. También consideró que se debe a las “millonarias inversiones en los mercados que no se pueden recuperar”.

Sosa asegura que este año se licitarán 50 módulos educativos y que en septiembre se verán entregas de obras en toda la ciudad, entre ellas salas velatorias y un centro cultural de barrio con teatro propio.

El nuevo Abasto es una de las apuestas que la comuna trata de consolidar

El municipio de Santa Cruz de la Sierra se concentra en tres prioridades para la ciudad

Según Angélica Sosa, presidenta del Concejo Municipal, hoy la gestión municipal vive el cambio de énfasis de la construcción y traslado de los mercados a la movilidad urbana.

A principios de agosto, Sosa participó de una explicación que el Ejecutivo realizó sobre las prioridades de la ciudad al Ministerio de Planificación y dijo que hay tres urgencias: un nuevo vertedero para los residuos sólidos, que solo para la expropiación de las 210 hectáreas se necesitarán Bs 38 millones (ya se modificaron partidas presupuestarias para pagarlo), la movilidad urbana con las licitaciones de las paradas, estaciones de transferencia y la línea BRT del primer anillo; y, finalmente, la revitalización del centro de la ciudad, que es el único programa que ya cuenta con una licitación.

Consultada sobre hasta cuándo se invertirá en consolidar los traslados de los mercados, Sosa dijo que hasta cuando sea necesario.

Para el politólogo José Orlando Peralta no solo de mercados y micros vive el cruceño. Apunta que la inversión en movilidad urbana es necesaria e importante, pero no se le debería dar prioridad en desmedro de otras áreas, como es la cultura.
“La creatividad y el talento sobraban. ¿Hasta cuándo la cultura va a ser el patito feo de la gestión municipal?”, se pregunta.

Pese a los reclamos, Sosa insiste en que en este año no se ha realizado ningún recorte a Cultura.