Avasalladores de Bajo Paraguá trataron de cercar una comunidad chiquitana para evitar la salida de los aprehendidos
Los habitantes de San José de Campamento denunciaron que los colonos llegaron con palos y piedras a bloquear las salidas de ingresos y la pista de aterrizaje. Permanecen en vigilia la noche de este viernes.
"Tuvimos que tocar las campanas", dijo Adolfo López, cacique de San José de Campamento, al ver a medio centenar de colonos llegar con palos y piedras hasta su comunidad.
"Se pararon en dos puntos, uno de estos era la pista de aterrizaje", explicó.
Sin saber de qué se trataba, dijo que se acercó a los extraños, quienes le informaron que estaban en busca de los buses con policías que transportaban a los aprehendidos en el avasallamiento al Bajo Paraguá.
"Querían que los ayudemos, pero nosotros no vamos a meternos en eso", dijo.
Como no se movían, los demás habitantes de San José salieron a increparlos y pedirles que se vayan. "Debido a eso, se movieron para el lado de los otros colonos, la comunidad Chirimoya", informó.
Pasada las 20:00 horas de este viernes 27, los habitantes de Campamento permanecían en vigilia, ya que existía el riesgo de que los avasalladores de Bajo Paraguá, distante a 50 km, embosquen a los policías que debían pasar con los aprehendidos.
Desde la Defensoría del Pueblo informaron que se estaban haciendo todas las diligencias ante el Comando Departamental de la Policía, para que se garantice la seguridad de los uniformados.
El equipo de la diputada María René Álvarez informó que hasta esa misma hora no sabían de su paradero, debido a que la señal no es buena.
Agregaron que la legisladora estaba con cívicos, caciques, funcionarios de Natura y otros actores, y que el diputado Richar Ribera ya se dirigió al Comando Policial a sentar la denuncia.
"No tenemos clara la información, pero nos dicen que los avasalladores han acordonado la zona, que son bastantes. Sin embargo, no tenemos mayores datos", indicaron.
Antecedentes
Este viernes, una comitiva con cívicos, concejales, alcalde de San Ignacio, jueza agroambiental, ABT y otros, se dirigió al área protegida municipal Bajo Paraguá para hacer una inspección en el lugar, ante las denuncias y un proceso judicial por avasallamiento y desmontes en ese lugar, que también es reserva forestal.
Según el equipo de la diputada y de una de las organizaciones participantes, fueron emboscados y obligados a escapar, sin que hasta la noche se sepa de ellos.
