(VER VIDEO) Era albañil, le cayó una base de fierro en la pierna y quedó lesionado. Ofrece dulces y galletas en la avenida San Martín

14 de julio de 2022, 11:25 AM
14 de julio de 2022, 11:25 AM

Con un canguro sujetado a su cuerpo carga a su hijo Acdiel Moisés, de 18 meses, para vender dulces todos los días, sin falta, en uno de los semáforos de la rotonda del tercer anillo interno y avenida San Martín, de la capital cruceña.

Ciro Barrientos Condori llega a su puesto de trabajo bien equipado. Además de las dos cajas de los dulces que venderá -varía entre galletas wafles, alfajores, chupetes, chocolates y turrón de maní- lleva un pequeño bolso con pañales, ropa y mamadera para su pequeño compañero. Son varias las horas que pasa en el lugar, llega en la mañana, descansa para el almuerzo y retorna por la tarde. Dice que lo que junta le alcanza para cubrir sus gastos diarios.

Para poder conocerlo, pidió hacer la entrevista en el costado de la avenida, donde hay una base de cemento que está junto a un tablero eléctrico en la acera. Esta base la usa para cambiar el pañal a su hijo o de ropa en caso de ser necesario. “Antes de la pandemia era albañil, se me cayó una base de fierro en la pierna izquierda y tuve que retirarme, ya no podía alzar peso. Hasta ahora sigo con dolor, pero tengo que vender para ganar unos pesos para el día”, dice Ciro, que llegó hace tres años a nuestra ciudad desde Tarabuco (Chuquisaca). 

Vea el video:


Recuerda con pesar su último trabajo en uno de los nuevos edificios que hay en la zona de Equipetrol, pues asegura que no le pagaron por el accidente.

Ciro tiene esposa y un hijo mayor. La mujer tiene diabetes y por un problema de salud no puede alzar peso. Es por ello que él sale a trabajar con su hijo menor, que pesa 18 kilos actualmente, nació con sobrepeso y está en tratamiento médico. 

Se declara cristiano, confiesa que su fe lo mantiene con las fuerzas necesarias para continuar en medio de las adversidades que le ha tocado vivir. En medio de lágrimas nos recita un pasaje bíblico, se calma y se alista nuevamente para retornar a su trabajo. Si pasa por la zona, seguramente lo encontrará, y si desea contactarlo, le dejamos su número de teléfono: 609-55631.


Se emociona al sentirse bendecido por Dios / Foto: Ricardo Montero