Consejo Facultativo de la Uagrm remite al Tribunal de Justicia Universitaria la denuncia contra una docente por agresión verbal
Los delegados docentes y estudiantiles se declararon incompetentes para evaluar la denuncia que hace una estudiante universitaria en contra de su docente, argumentando que el Consejo Facultativo no tiene atribuciones disciplinarias. El decano buscará una conciliación
Este jueves se reunió el Consejo Facultativo de Ciencias Jurídicas, Políticas Sociales y Relaciones Internacionales de la Universidad Autónoma René Moreno para analizar la denuncia de una estudiante contra una docente, por agresión verbal y discriminación.
El decano de Ciencias Jurídicas de la Uagrm, Alfonso Coca, indicó que los consejeros se declararon incompetentes para investigar el tema, argumentando que el Consejo Administrativo no tiene atribuciones para juzgar disciplinariamente a un docente, según el estatuto, por lo cual derivaron el caso al Tribunal de Justicia Universitaria, para que investigue si hay indicios de culpabilidad.
"Toda documentación fue remitida al Tribunal de Justicia Universitario, pero yo, como decano de Ciencias Jurídica, a título personal estoy llamando a una conciliación previa, para ver si la docente y la estudiante deponen actitudes y puedan llegar a la cultura de la paz, a una armonía social y a un diálogo sincero donde ya no se melle la dignidad de las personas", declaró Coca.
El decano señaló que el Tribunal universitario analizará el caso conforme a sus tiempos y dará un veredicto para resolver el tema, que causó "vergüenza" a la casa de estudios superiores cruceña.
LA DENUNCIA
Esta semana, la estudiante Mónica Velásquez denunció a su docente Rosario Chávez por discriminación luego de recibir una serie de insultos, palabras que fueron difundidas públicamente mediante un audio.
La universitaria alegó que el problema con su catedrática surgió por unos reclamos que hizo cuando cuestionó por qué una estudiante que no presentaba sus deberes tenía mejores calificaciones, situación que desató el conflicto.
Velásquez asegura que los insultos eran frecuentes, sintiendo que la docente se ensañó con ella; sin embargo, en su defensa, la catedrática alegó que la denuncia era falsa y más bien acusó a la estudiante de no cumplir con sus trabajos a tiempo.
La docente denunciada calificó de "malcriada" a la universitaria y aseguró que en ningún momento emitió declaraciones falsas en contra de su alumna.
El caso se hizo público y se viralizó en las redes sociales, razón por la que las autoridades universitarias analizan el caso para ver si existe un grado de responsabilidad y culpabilidad en la docente.
