Los uniformados despejaron el bloqueo del puente y tienen la misión de restablecer el Estado de derecho en el pueblo. El cerco sigue en San Julián y Cuatro Cañadas

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22 de noviembre de 2019, 3:00 AM
22 de noviembre de 2019, 3:00 AM

Texto: B. Vaca / Corresponsales

Un contingente policiaco-militar hizo escapar a los bloqueadores en el puente de Yapacaní que mantuvieron sometidos durante 10 días a los pobladores y cortaron el tránsito vehicular, ocasionando pérdidas económicas y violencia, para exigir la renuncia de la actual presidenta, Jeanine Áñez, y el retorno del expresidente Evo Morales, que renunció al cargo.

El pelotón combinado llegó al lugar alrededor de las 17:00. Constaba de policías y militares que ingresaron al puente con un vehículo antidisturbios por delante, seguido de agentes antimotines que rápidamente despejaron el punto de bloqueo sin oposición, puesto que los movilizados huyeron en estampida en motos y a pie.

Los bloqueadores quemaron llantas en el pueblo. “Hemos venido a que haya libre tránsito. Por eso hemos sacado a las personas que estaban bloqueando en el puente; no estamos en contra del pueblo, queremos un clima de paz en Yapacaní. Abrir la vía para que puedan sacar sus productos, que los mototaxistas puedan trabajar. No vamos a permitir que personas violentas y encapuchadas alteren el orden”, les dijo a un grupo de personas Enrique Terán, subcomandante de la Policía.

Otra ruta cerrada

Después del despeje de la carretera en Yapacaní, Santa Cruz sigue sin conexión terrestre con Beni a raíz de la persistencia de los bloqueos en los municipios de San Julián y Cuatro Cañadas.

Allí y en otras comunidades ya se siente la escasez de gas licuado, gasolina, diésel y alimentos. Los comerciantes comenzaron a especular con los precios del fideo, azúcar y otros productos de la canasta familiar.

“Cuatro Cañadas debe tener su comité cívico que defienda los intereses de todos y no de unos cuántos. Con autoridades capaces y valientes, se puede”, dijo un vecino que prefirió el anonimato.

Los bloqueos de Cuatro Cañadas y San Julián afectan al sector productivo de San Javier, especialmente el de queso y horneados que tienen que sacrificar más tiempo y dinero para que los productos puedan llegar a la ciudad capital, lo mismo que la ganadería, pues los camiones con reses no pueden llegar a Santa Cruz.

El tradicional queso criollo de San Javier que a finales del mes de octubre tenía un costo de Bs 25, actualmente se vende en Bs 10 el kilo por la sobreoferta.

En Guarayos, persiste un bloqueo en Santa María, en la ruta entre Ascensión y San Pablo. Una comisión estaba negociando una salida con los campesinos para levantar el bloqueo de forma pacífica, manifestó Roly Aguilera, secretario de la Gobernación, quien reveló la existencia de otro bloqueo en la comunidad El Churo, en el límite con Cochabamba por la vía antigua.

Se normaliza en los valles

Luego de que el miércoles la Policía despejara el bloqueo de Tiquipaya, las actividades en la provincia Vallegrande se normalizan con la provisión de carburantes, especialmente la gasolina que es muy demandada por los productores que usan las bombas de riego con ese combustible.

Los fruticultores se preparan para la cosecha de duraznos, ciruelos y manzanas. La producción de hortalizas y legumbres es normal, lo cual hará bajar los precios cuando lleguen a la capital.

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