Un testigo aseguró a la activista María Galindo que los policías de la cárcel llevan a las internas del penal al pabellón de varones para que se prostituyan. El dinero que cobran lo reparten entre los uniformados y un menor porcentaje va para las víctimas de prostitución

14 de febrero de 2022, 19:25 PM
14 de febrero de 2022, 19:25 PM

La activista de Mujeres Creando, María Galindo, a través de una transmisión en su cuenta de Facebook y de Radio Deseo 103.3 F.M., denunció que en la cárcel de Palmasola policías y el  director de Régimen Penitenciario obligan a las reclusas a prostituirse, llevándolas del pabellón de mujeres al de los varones.

Un testigo clave que se dio cuenta de las fechorías que ocurren dentro del penal aseguró que cuando los policías observaron que este empezó a cuestionar que las mujeres eran víctimas de proxenetismo coercitivo, fue despedido del lugar, ya que él trabajaba antes en el área administrativa de la cárcel cruceña.

Galindo, quien optó por proteger la identidad del testigo denunciante, escuchó las declaraciones y pidió a las autoridades máximas investigar y parar las atrocidades.

El extrabajador del penal, indicó que se animó a denunciar recientemente el hecho a fin de que se respete a las mujeres y no sean obligadas a prostituirse.

"En Palmasola, cuando ingresa una presa, los policías que ingresan a la cárcel las obligan a ofrecer a los presos servicios de trabajo sexual, esta no es prostitución o trabajo sexual, sino una prostitución coercitiva”, dijo Galindo.

Según el relato del extrabajador, los policías llevan del PC2 (Pabellón de mujeres) al PC4, pabellón de varones, a las reclusas para que cumplan con el trabajo sexual. Además, que supuestamente el director de Régimen Penitenciario, Mauricio Romero, tiene pleno conocimiento de las actividades.

EL DEBER trató de contactar a Romero; sin embargo, éste nunca atendió el llamado para conocer su versión.

“A las internas, las privadas de libertad, las prostituyen, van del PC2 al PC4, como es grande Palmasola, de esa sección las sacan los policías y las llevan al PC 4 para prostituirlas”, relató el testigo.

La denuncia agrega que los policías se quedan con la mayor parte del dinero, poniendo por ejemplo que de Bs 100, 70 van para los uniformados y solo Bs 30 para las reclusas.

El testimonio del testigo menciona que las internas nuevas  y las que ya se han acostumbrado a que se las obligue a prostituirse, tienen que cumplir sin posibilidad de negarse. 

Empero, no solo Romero tendría supuestamente conocimiento de las actividades irregulares, sino también el director nacional, Juan Carlos Limpias. “Hacen de todo, y esto lo sabe este señor, el mayor Santos que es asesor de  Juan Carlos Limpias, quien está metido también con la concesionaria (que provee alimentos) que para  trabajar dando de comer a los privados de libertad, también le depositan pues”, agregó el denunciante.