En el río Yapacaní el nivel de las aguas subió hasta seis metros y en el río Ichilo, más de 13. Varios pobladores tuvieron que dejar sus casas y sembradíos. EL DEBER ubicó a dos personas atrapadas

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21 de mayo de 2017, 5:00 AM
21 de mayo de 2017, 5:00 AM

Máximo Acai y Luciana Pérez quedaron atrapados en una vivienda que está a la orilla de la carretera entre Yapacaní y el Puente Ichilo, en el kilómetro 53. La parte baja de la casa quedó bajo el agua y tuvieron que pedir ayuda. Anoche, a las 21:00, todavía no se los había rescatado.  


Esta es una de las situaciones que el pronóstico para el fin de semana alertaba la llegada de mal tiempo, pero no esperaban que los niveles del río Yapacaní suban al punto que ingresen a su cabaña en el puerto Yapacaní. El nivel de las aguas, en esta zona distante a 110 kilómetros de la capital cruceña, en la provincia Ichilo, comenzó a subir a las 2:00, pero la fuerza del turbión recién ingresó cinco horas después a la cabaña de Jhonny Cruz y Polonia Castedo, obligándolos con la ayuda de sus tres hijos a sacar las heladeras y la rocola para trasladarlas a un lugar más elevado y así evitar su deterioro.

“Estamos acostumbrados a los turbiones, son nueve años que trabajamos en esta  cabaña en el puerto Yapacaní, pero hacía unos tres años que no se entraba el agua. Esta vez llegó a unos 40 centímetros del ras del piso”, cuenta Polonia, que sostiene no temerle a las aguas del río Yapacaní. Luciana y Máximo se vieron afectados por un desborde del río Ichilo, con una crecida de casi 14 metros.


 Son afiliados al Sindicato 2 de Agosto, conformado por 19 familias, todas afectadas, que lamentan la pérdida de su producción de plátanos, cítricos y maracuyá a punto de ser cosechados. Por unas horas fue suspendido el tránsito de transporte pesado por el puente Yapacaní. Horas más tarde la situación se normalizó.


También se han  reportado vivientes de las comunidades San Salvador, Puerto Grether y Puerto Ramos. "Estamos en el camino, hemos abandonado nuestras casas, esta vez las aguas subieron como nunca y nos corrieron", relató Lucio, un vivientes de San Salvador.

Informe del Searpi
Ernesto Arnez, responsable de Hidrología del Servicio de Encauzamiento de Aguas y Regularización del Río Piraí (Searpi), informó de que los ríos Yapacaní e Ichilo resultaron muy afectadas, con crecidas que alcanzaron casi seis y más de 13 metros, respectivamente, pero que el periodo intenso de lluvias ya terminó y los niveles están volviendo a la normalidad. Dijo que el peligro pasó y que se constató que los defensivos respondieron, aunque la barranca izquierda del Yapacaní, que colinda con la población,  está algo erosionada.


El Píraí también tuvo una crecida en La Angostura (1,85 metros) y esperan que hoy esté en su nivel normal.