El Gobernador cruceño criticó la ausencia de la Policía, la Fiscalía y el INRA en la toma ilegal de tierras. Un analista dice que la modificación a los reglamentos de la Ley del INRA ‘abrió las puertas’ para esta situación

11 de diciembre de 2022, 11:25 AM
11 de diciembre de 2022, 11:25 AM

Para Luis Fernando Camacho, gobernador de Santa Cruz, está claro que en estos 17 años el Movimiento al Socialismo (MAS) descubrió que el odio y la confrontación son métodos para buscar cómo dividir al país, y por eso, considera que en la actualidad el Gobierno está con una política de agresión contra Santa Cruz nunca antes vista.

Camacho remarcó que esta situación se refleja con las persecuciones políticas y la gran cantidad de avasallamientos, secuestros y agresiones contra los propietarios de los predios tomados, incluso a los periodistas que cubren estos hechos.

La autoridad precisó que desde el año pasado más de 50 predios privados han sido avasallados a tiempo de criticar la ausencia de la Policía, la Fiscalía, el Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) y de otras instituciones del Estado, que han permitido instalar un escenario de peleas y conflictos entre ciudadanos, ante el silencio cómplice de las autoridades nacionales, subrayó Camacho.

Una lectura técnica

Gonzalo Colque, exdirector de Fundación Tierra, indicó que para entender este problema, se debe tomar en cuenta la modificación de algunos reglamentos de la Ley del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) realizada, por el Gobierno del MAS, el 24 de enero de 2018.

Mediante el Decreto Supremo 3467 se crea la autorización provisional de asentamientos. Así, desde 2018 el INRA avaló 1.400 asentamientos provisorios, la mayoría en Santa Cruz. Ya no se tomaron en cuenta las anteriores exigencias que había para los programas de asentamientos humanos”, precisó Colque.

El especialista puntualizó que en la actualidad esta situación al Gobierno se le salió de las manos, porque no puede proceder al desalojo, ya que ellos mismo crearon el mecanismo de acceso a tierras y predios, bajo la figura de asentamientos provisionales, que en última instancia también tienen un componente político, reflexionó Colque.