Detectan movimientos de tráfico de armas y apuntan al crimen “asentado” en el país
Los tres operativos se ejecutaron en Santa Cruz desde abril, uno de ellos tenía destino El Chapare. Aguilera reconoce que en los tres años de gestión hubo un incremento de denuncias en este delito y que se han presentado más de 30 casos
En abril y julio de este año, agentes del Grupo Especial de Investigación Policial (CEIP) junto a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) perpetraron al menos tres distintos operativos de envergadura en Santa Cruz en el que colectaron más de una centena de piezas y armas de grueso calibre que estaban destinadas al crimen organizado ligados al narcotráfico y también dirigidos hacia la región del Chapare.
Fue la información que dio hace unas semanas el viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, aunque las fuentes consultadas advierten que estos hechos desvelan que el tráfico de armas y drogas están en franco crecimiento en el país, con el establecimiento de grupos de insurrección armados que cuentan con el apoyo de bandas internacionales junto al Tren de Aragua.
El primer caso se desarrolló el 19 de abril en la capital cruceña. En aquel operativo se secuestraron 30 fusiles automáticos de asalto provenientes desde Brasil que estaban listos para ser ensamblados y enviados hacia el Trópico de Cochabamba, según Aguilera. El armamento de asalto, modelo AR-10, calibre 7.62 milímetros, estaba dentro de cajas de cartón, a bordo de un vehículo de marca Volkswagen modelo antiguo.
“Sólo faltaban las colas del disparador; envían los fusiles en cajas de cartón desarmados y se ensamblan en el trópico de Cochabamba”, dijo la autoridad.
El segundo hecho se suscitó el 13 de junio también en Santa Cruz. Los sabuesos del CEIP interceptaron un vehículo en el que cinco personas descargaron en un bus 103 paquetes de marihuana que tenía un peso de 115,250 gramos, además de 20 fusiles de francotirador SR-25, todos nuevos y desarmados, sin el cajón de mecanismo de disparo.
El último caso se presentó el 29 de julio. El mismo viceministro Aguilera fue quien dio detalles del secuestro de 84 piezas de armas de fuego de grueso calibre, 54 cargadores, una escopeta y un revólver que tiene relación con el segundo caso reportado que tenía destino el mercado de las organizaciones de tráfico de armas y de drogas.
“El Gobierno ha denunciado tráfico de armas en múltiples ocasiones. En los últimos tres años hemos registrado un incremento significativo en la identificación y denuncia de estos delitos. Hasta la fecha, se han presentado más de 30 casos de tráfico de armas en todo el país. Estos casos incluyen tanto grandes operaciones de contrabando como decomisos menores”, aseveró Aguilera en contacto con esta casa periodística.
Organizaciones asentadas
El experto antidroga y de seguridad, Franklin Alcaráz, consideró que la ciudadanía se está concentrando en los temas políticos electorales, mientras crece el tráfico de armas y del narcotráfico como en el Chapare.
“No hay que olvidarse que Evo Morales dio a entender que se crearían las milicias armadas, que en el Chapare pueden armarse como una defensa del trópico. Entonces, alguien debe estar pagando por esas armas, alguien debe estar corriendo el riesgo de cruzar las fronteras para comercializar las armas y alguien debe estar pagando”, afirmó en contacto con este rotativo.
Opinó que se debe tomar en cuenta lo que sucede en Venezuela, porque en la proximidad de las elecciones generales en Bolivia no se sabe cómo pueden reaccionar los grupos ‘progres’, porque están muy bien entrenados por extranjeros para reprimir a quienes se opongan a sus intereses.
Por su parte el abogado y exmilitar, Jorge Santistevan, afirmó que el crimen organizado está en crecimiento ante un “control débil que ejerce el Estado con sus instituciones, cuyas circunstancias más comunes son la corrupción, la ineptitud y la falta de implementos materiales sofisticados”.