El testimonio que dio el excapitán de la Policía Orlando Araujo puso en evidencia su cercanía con los agentes de la Felcn. Un testigo dice que fue amenazado de muerte por él

7 de junio de 2020, 18:30 PM
7 de junio de 2020, 18:30 PM

El excapitán de Policía, Orlando Araujo Becerra, un agente entrenado por la DEA y oficial gestor y partícipe de operaciones antidroga importantes, implicó a un alto jefe del Grupo de Inteligencia y Operaciones Especiales (GIOE) de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) con el caso del 'narcojet' que fue detenido en México, a finales de enero, con una tonelada de cocaína.

La revelación es parte del expediente del proceso y de la transcripción de la audiencia de medidas cautelares de Araujo, conocido como 'Menono' en el mundo policial, que llevó adelante el juez Manuel Baptista, el 14 de mayo. Desde ese día Araujo está preso en Palmasola, en el PC-6, donde convive con otros ex policías.

EL DEBER accedió al documento donde el ex-policía habló frente al juzgador y trató de mostrarse alejado del 'narcojet', a tiempo de implicar a más personas en lo ocurrido. Reveló que un alto jefe del GIOE había hablado con él un mes antes de su detención y que incluso cruzaron mensajes. “Todo eso está en mi teléfono, pueden verlo, ellos lo tienen porque me secuestraron el teléfono”, disparó Araujo.

Pero además del testimonio, se ordenó la elaboración de un informe oficial pedido por los jefes de la Felcn, quienes pasaron a conocimiento de autoridades superiores de ese organismo antinarcóticos.

De forma extraoficial EL DEBER conoció que lo manifestado por Araujo sobre uno de los jefes del GIOE es parte de pesquisas internas, en paralelo con los delitos por los que el excapitán es procesado por tráfico de sustancias controladas, organización criminal, asociación delictuosa y confabulación.

Frente al juez

Araujo le dijo al juez, frente a agentes, abogados y fiscales, que la Policía siempre supo sobre su paradero, que es falsa su implicación en el caso e incluso se animó a lanzar algunas pautas de investigación, que, según él, son claves para descubrir la verdad sobre las manos que movieron el dinero que está detrás de la droga y los verdaderos dueños del narcocargamento.

Fui policía y he manejado todas las armas, entonces no pueden encontrar harina en mi casa, siempre tengo una y otra cosa, cacerinas que no son de juguete”, afirmó Araujo, refiriéndose a la pistola calibre 25 milímetros y a los 774 proyectiles calibre 5.56, 9 y 22 milímetros, que los agentes encontraron cuando allanaron su casa en la zona norte de la ciudad. También se recogieron cargadores y equipos de transmisión satelital.

El ex investigador policial dijo que la pistola se la regaló a su esposa para que se protegiera cuando se quedara sola en su casa y negó ser parte de la operación de transporte de una tonelada de cocaína encontrada en México. 

“Tengo la intención de colaborar, de repente están equivocando la investigación... Se tiene que agarrar por la cabeza o la cola, no se puede estar agarrando del medio...”, dijo a tiempo de interrogar ¿de quién es la droga?, ¿quién la mandó? Si es mexicano, ¿quién envió o recibió la plata para comprar la droga?”.

Para Araujo, que tiene otros dos procesos penales aún irresueltos, mover una tonelada de droga requiere de mucha logística, “no se trata de dos kilos o de un señor que vende en la esquina y los compró"

Las pesquisas que lleva adelante la unidad antinarcóticos y la Fiscalía señalan al ex capitán como el hombre clave en la operación que se produjo la madrugada del 28 de enero en el aeropuerto de Guayaramerín (Beni), para que aterrice una nave y en cuestión de 40 minutos cargue una tonelada de cocaína, además de combustible, antes de partir rumbo a México.

Las amenazas de Araujo

Si bien con su defensa material en la audiencia de medidas cautelares Araujo pretendía desvirtuar las acusaciones en su contra, la Fiscalía y la Felcn tienen un testimonio que lo ponía en desventaja.

Los investigadores hicieron conocer el testimonio del responsable de la torre de control del aeropuerto de Guayaramerín, que reveló que dos días antes de su aprehensión recibió un llamado telefónico de Orlando Araujo, para que no brindara ninguna información sobre el narcojet matrícula N18ZL.

Específicamente le habría pedido que no dijera que aterrizó en la pista beniana y luego “me amenazó con el código del silencio, o si no te mueres”, testificó el funcionario que está bajo detención preventiva.

Esta afirmación fue rechazada de forma categórica por el abogado Óscar Auza, que defiende al excapitán Araujo, pero la declaración suma al expediente que se tendrá que presentar en un juicio posterior.