En el inicio de la Semana Santa, varias familias josesanas prepararon altares en las veredas de sus domicilios para recibir la bendición del sacerdote que recorrió las calles del pueblo con la imagen del Nazareno montado en un burro

5 de abril de 2020, 17:14 PM
5 de abril de 2020, 17:14 PM

Las familias josesanas prepararon altares en las veredas de sus domicilios, colocando palmas y ramos de flores y esperando la bendición del sacerdote, que había programado recorrer las calles de este misional pueblo, con la imagen del Nazareno montado en un burrito.

A diferencia de años anteriores, en los cuales esta imagen que salía desde Betania, altar ubicado en la calle Velasco, entre Jesus Chávez y Germán Busch, para ingresar al Templo Misional Jesuítico; en el presente recorrió las calles de San José de Chiquitos, acomodado en la carrocería de una camioneta, la cual era acompañada por un Fraile Carmelita, quien esparcía bendiciones con agua santificada.

Las tradicionales concentraciones de feligreses en Betania y en el templo, que reunían a mas de 5.000 creyentes, fueron suspendidas para dar cumplimiento al decreto de Estado de Emergencia Sanitaria y cuarentena total en todo el territorio nacional.

Por este año, y esperando que sea el único, se han modificado los ceremoniales y rituales religiosos, que desde la época de las Reducciones Misionales Jesuíticas se encontraban intactas, pero la fe sigue inquebrantable.

El paso de la imagen del Nazareno, montado en un burrito, arrancó lágrimas de alegría y nostalgia, e hizo levantar plegarias para que la pandemia mundial se acabe.

Los niños no han podido salir a las afueras del pueblo a recoger las flores amarillas, con las cuales se recibía al Nazareno y al Niño de Ramos a la entrada del templo.