Este es el grupo más golpeado por los decesos. Los jóvenes siguen siendo los más afectados por los contagios. Ayer la Iglesia católica conmemoró el Día del Abuelo

27 de julio de 2021, 8:39 AM
27 de julio de 2021, 8:39 AM

En muchos hogares los abuelos recibieron muestras de cariño este 26 de julio, fecha en que la Iglesia católica celebra la fiesta de San Joaquín y Santa Ana, padres de la Virgen María y abuelos de Jesús. Los mayores de 60 años son los más golpeado por la pandemia, toda vez que el 58 por ciento de las muertes que se registran en Santa Cruz están dentro de este grupo etario.

De acuerdo al informe epidemiológico, de los 7.100 fallecidos contabilizados en toda la pandemia hasta el mes de junio, 4.077 (58%) personas mayores de 60 años perdieron la batalla contra el virus del Covid-19, de las cuales 1.959 (28%) tienen entre 61 y 70 años; 1.418 (20%), entre 71 y 80 años; 618 (9%), entre 81 y 90 años y 82 (1%), mayores de 91 años de edad.

Otro grupo muy afectado está entre los 51 y 60 años, donde 1.568 fallecieron aquejados por este virus.

El director del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Erwin Viruez, recalcó que los adultos mayores siguen siendo el sector más golpeado por la pandemia de coronavirus y, prueba de ello, es que la que sigue teniendo mayor mortalidad la población de 50 años en adelante y las personas con enfermedades de base, toda vez que “el 80% de las muertes se da en este grupo de la población”.

En este sentido, alentó a los adultos mayores a acudir a los puntos de vacunación a recibir la dosis que protege principalmente contra las formas graves de la enfermedad.

No obstante, la autoridad sanitaria indicó que los contagios se siguen dando especialmente entre la población joven, que es la que lleva el virus al hogar y contagia a los adultos mayores.

De acuerdo con los datos oficiales, de los 162.992 casos positivos que se registraron desde el inicio de la pandemia hasta el 23 de julio, el 51% de los casos se dio en personas de entre 18 y 40 años. De este grupo los más afectados fueron los de 31 y 40 años, con el 26% del total de casos; seguidos por los de 18 y 30 años, con el 25%.

A diferencia de las primeras y segundas oleadas, en esta tercera también existió una gran cantidad de adultos jóvenes ingresados en las terapias intensivas e intermedias, dice el reporte del Sedes.

La razón para que se contagien los más jóvenes es que integran la población económica y laboralmente activa, explicó Viruez, aclarando que siempre fue objetivo del Sedes vacunar a esta población para contener el contagio del coronavirus.

Vacunación

Los adultos mayores fueron los primeros en recibir la vacuna contra el Covid-19, pero un gran número también está esperando el segundo componente de la vacuna rusa y está en la incertidumbre, al igual que el resto de la población.

De los 158.533 adultos mayores entre 60 y 69 años de edad, 99.181(62%) recibieron la primera dosis, 46.895 (29,58%) la segunda dosis y 2.291 (1,45%) con la unidosis.

De la misma forma, de los 88.345 que hay entre 70 y 79 años, 48.096 (54%) recibieron la primera dosis, 24.499 (27,73%) la segunda y 932 (1,05%) la unidosis.

En cuanto a los mayores de 80 años, de las 38.714 personas, 16.452 (42,50%) recibió la primera dosis y 10.369 (26,78%) logró su esquema completo. Además, 351 (0,91%) personas recibieron la vacuna Janssen, que es unidosis.

En Bolivia los mayores de 60 años suman 1.191.515, que representan el 10,2 por ciento de la población vacunable.

Vulnerabilidad

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) hace notar que las personas mayores tienen mayor probabilidad de enfermar gravemente si se infectan con el virus y advirtió que la mayoría de las muertes por el Covid-19 afectan a los mayores de 60 años.

Proyección

Se estima que para 2050 se duplicará el número de personas mayores de 60 años a escala mundial. En 2025, las personas de 60 años y más representarán el 18,6% de la población total de la región.

América Latina y el Caribe es la segunda región de más rápido crecimiento en términos del número de personas mayores de 60 años, detrás de África. Sin embargo, el aumento de la esperanza de vida no se traduce en calidad de vida, según informes de la OPS.