El que obtuvo la mejor evaluación es un niño de siete años que estudia en Vallegrande y tiene un coeficiente intelectual de 144. Las autoridades educativas evalúan a otros ocho alumnos que sobresalen en el aprendizaje

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9 de agosto de 2021, 8:58 AM
9 de agosto de 2021, 8:58 AM

La Dirección Departamental de Educación (DDE) este año promovió de curso a 12 estudiantes que destacan por su talento extraordinario. El primero en la lista es un escolar de siete años de Vallegrande.

El reconocimiento para estos escolares es la autorización para ‘saltar’ un curso, es decir, recibieron la libreta del año que iniciaron y desde el segundo trimestre pasan clases en el curso inmediato superior.

Bruno Forcucci Cárdenas, que estudia en la unidad educativa José Fina Bálsamo Sor Anita Engelhardt en el municipio de Vallegrande es el que encabeza la lista. El pequeño fue evaluado por su grado de conocimiento y determinaron que tiene un coeficiente intelectual de 144, cuando el promedio es inferior a 120.

Leidy Cárdenas, la mamá de Bruno, remarca que su hijo es autodidacta, pues es muy curioso y dedicado. Recuerda que empezó a leer cuando estaba en prekínder.





Bruno Forcucci Cárdenas destaca desde muy pequeño por ser inquieto y tener interés por aprender



“Desde pequeño, antes de la escuela, nos pedía que le demos tarea, entonces dibujábamos las letras en un cuaderno y él las repetía. Siempre tuvo ganas e inquietud. Aprendió de forma autodidacta, porque preguntaba qué decían los letreros, nosotros no le pusimos profesor”, comenta.

Explica que Bruno para se guiaba de lo que veía. Entre una de las gratas anécdotas que recuerda es el día en que por primera vez notó que su pequeño hijo podía escribir. Fue en un negocio que tenían, donde otros niños borraron el menú de comida que estaba en una pizarra y Bruno lo volvió a escribir.

“Las letras estaban una arriba, otro abajo, pero se entendía y Bruno solo estaba empezando el kínder”, asegura.

Su padre, Rómulo Forcucci también relató que su hijo siempre ojeaba los libros, y él pensaba que solo veía los dibujos; sin embargo, en una ocasión le preguntó cómo se leían tres letras, luego lo siguió y se dio cuenta que podía leer.

Reconoce que por el trabajo no se dio tiempo para incentivarlo en la lectura, aunque desde muy pequeño lo inscribió a clases de teclado y de fútbol.

Bruno es hijo único, sus padres viven en el municipio de Vallegrande, donde las maestras lo destacaban por su aprendizaje.

“Él se aburría en prekínder, porque estaba más adelantado, luego en kínder la maestra nos dijo que mi hijo ya leía y que al resto recién se le tenía que enseñar las vocales, por eso nos sugirió hacer el trámite para adelantarlo de curso”, recordó Leidy.

En aquella ocasión los padres decidieron mantenerlo en inicial para que también pueda interactuar con otros niños. Aunque, su maestra de primero les explicó que en el primer trimestre Bruno ya leía de forma fluida, además escribía, sumaba, restaba y multiplicaba, por lo que le volvió a sugerir adelantar el curso.

Luego comenzó la pandemia, así que se decidió que la evaluación la realizaría recién este año.

La directora del establecimiento educativo, María Elizabeth Peña, confirmó que desde nivel inicial identificaron el avance rápido en la formación de Bruno.

“Nos sorprendía que el niño entre kínder y primero ya leía perfectamente, comprendía un texto y los niños de su edad leían las vocales”, explica a tiempo de añadir que desde el año pasado Bruno pasaba clases como oyente en el curso superior.

En este segundo trimestre del año, Bruno ya tiene su libreta de aprobación del segundo curso, que es el curso que le correspondía este año, pero ya se convirtió en un estudiante regular de tercero de primaria.

En total son 12

Junto a Bruno también destacan Sophia Thaís Lino Peña, del colegio Hermanos Antonio y Marco Cavanis; Kiara Yessenia Gonzáles Andia, del Fray Santiago de Rivero; David Eliel Pacheco Salas, del Británico; Carla Rachel Matienzo Suárez, del Enrique de Ossó II; Christopher Darius Valero, del Carlos Vásquez Barboza; Rosio Mishel Gonzáles Andia, del Demetrio Gómez; Thiago Rada, del Manantial de Vida; Deiby Junior Ramos, del Poly Villarroel Barba; Itzia Eyelen Arispe Zurita, del San José Obrero; Santiago Durán Espinoza, del Angeline Rivera; y Edlyn JoredithMolina Álvarez, del Internacional Bilingue Santa Cruz.

En el caso de Santiago Durán, pasó de tercero a cuarto de primaria. Su madre, resaltó que su hijo es muy hiperactivo y le gusta aprender nuevas cosas.

Carla Espinoza, la mamá de Santiago, comentó que el pequeño en kínder ya sabía leer, escribir y sumar, por lo que no estaba al mismo ritmo que el resto de sus compañeros.

Añade que lo impulsó guiándolo en lo que le interesaba aprender. Santiago tiene de coeficiente intelectual 131.

También está Thiago Rada, que estudia en la unidad educativa Manantial de Vida en el municipio de San Julián. Él pasó de segundo de primaria a tercero.

El padre de Thiago, René Rada, destacó que desde kínder intentaron ascenderlo un curso, pero recién se pudo completar el trámite este año.

Manifiesta que Thiago aprendió a leer en kínder y tiene mucho interés en matemáticas. Ahora pasa clases de inglés y de fútbol.

“Yo tengo tres hijos y todos se ayudan. La característica de Thiago es que es muy hiperactivo y también es muy servicial, hace las actividades de casa”, resalta René, quien es de Beni y su esposa de Chuquisaca, pero debido a que viaja por distintas zonas, Thiago nació en Pando.

El director del establecimiento educativo donde estudia Thiago, Emilio Callizaya, explicó que desde pequeño el escolar destaca por su capacidad en la lectura y el análisis de textos, pese a que está solo en primero de primaria.

“Todas estas cualidades nos llevaron a pedir la evaluación de Thiago y ya desde el segundo trimestre está pasando clases en su nuevo curso. Es el primer estudiante destacado que identificamos y es una experiencia”, resalta.


Santiago Durán este año también fue promovido de curso. Pasó de tercero a cuarto de primaria


Evaluaciones

El responsable del programa Talentos Extraordinarios, de la Dirección Departamental de Educación (DDE), Carlos Narvaez, indicó que este año recibieron 26 evaluaciones, las mismas que fueron derivados al centro espacial donde se encargar de determinar si corresponde o no incluirlos en lo que se denomina Talentos Extraordinarios.

Señaló que hasta el momento 12 fueron identificados con esta categoría, otros seis no calificaron, y queda evaluar a los ocho restantes. Aclaró que estos últimos, en caso de que sean considerados como ‘talentos’ no podrán ascender un curso, pues ya está muy avanzado el desarrollo de contenidos este año y recién pueden acceder el próximo año.

“Todos los que fueron identificados como talentos, ya están pasando clases en su nuevo curso para que no se atrasen en el avance de contenidos”, remarcó.

Narvaez precisó la mayoría es de primaria y solo uno está en 5to de secundaria.

Agregó que la mayoría de los postulantes son de unidades educativas del área urbana, pero hay de Porongo , de Vallegrande y San Julián.

El año pasado, por la pandemia no se realizó ninguna evaluación, pero ahora se hizo de forma presencial y semipresencial, con reducida cantidad de personas. Entre los profesionales participan trabajadores sociales, sicopedagogos y psicólogos.

Thiago nació en Pando, pero estudia desde pequeño en Santa Cruz