Son dos los terrenos privados que fueron loteados en Montero Hoyos. Sus dos propietarios fueron severamente golpeados el fin de semana, luego de que intentaran desalojar a las personas que se asentaron en el lugar.

14 de septiembre de 2021, 7:25 AM
14 de septiembre de 2021, 7:25 AM

Javier Morales, de 49 años, se encuentra internado en un hospital de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, luego de que el fin de semana fuera maniatado y golpeado brutalmente por un grupo de personas que se asentaron en su terreno de 8.000 metros cuadrados (m2), en Montero Hoyos.

“Me amarraron los brazos al pecho y también los pies para darme palazos en todo el cuerpo. Fueron 10 personas las que me agredieron durante varios minutos. Ellos me tuvieron secuestrado, decían que me iban a matar”, comentó el afectado en contacto telefónico con EL DEBER.

Este conflicto con los loteadores se inició hace poco más de un mes, según cuenta Javier, pues avasallaron su propiedad y la de su vecino, Peter Rubén Santa Cruz, que es de 9.300 m2. Los dos terrenos fueron divididos en 70 lotes, donde fueron instaladas varias carpas y en las cuales actualmente viven varias familias.

Los dos afectados iniciaron acciones legales contra las personas que se asentaron en sus tierras, pero los procesos no progresaron. Además, ambos obtuvieron el apoyo de la junta vecinal de un barrio de Montero Hoyos, empresarios ganaderos y cooperativas de la zona, quienes los identificaban como los verdaderos propietarios de los terrenos.

“Fuimos en varias oportunidades con las cartas de apoyo de los vecinos que me reconocen como propietario y les pedimos de manera pacífica que desalojen, pero no lo hicieron. De esta manera,  (el domingo) me trasladé con Peter hasta el lugar acompañados de otras 40 personas, entre familiares y amigos, para hacerles recuerdo que debían abandonar nuestras propiedades y nos agredieron con piedras y palos”, contó Javier.

El afectado dijo que eran casi cien las personas que hicieron escapar a sus conocidos y luego lo agarraron para golpearlo brutalmente. De esta misma forma fue castigado el otro propietario. “A Peter le hicieron 13 puntos en la cabeza para suturar una lesión y yo recibí ocho puntos. Nos partieron la cabeza a palazos, querían matarnos”, contó.

Javier presentó una denuncia en la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) por las agresiones que sufrió y espera que las 10 personas que lo golpearon,  entre ellas siete mujeres y tres hombres, sean sancionados de acuerdo a ley. Mientras tanto permanece internado y será evaluado por un forense para determinar los días de incapacidad que tiene.

“Además de sancionar a los agresores, las autoridades municipales y del INRA (Instituto Nacional de Reforma Agraria) deben atender nuestros pedidos de ayuda para desalojar a los loteadores, que de manera ilegal se asentaron en dos terrenos privados”, demandó el afectado.