Ramiro Ramos Roca se ganaba la vida como carretillero en el mercado Los Pozos. Una disputa por la propiedad de la casa, en el barrio Bicentenario, habría sido el motivo del asesinato

13 de diciembre de 2021, 14:48 PM
13 de diciembre de 2021, 14:48 PM

En las redes sociales pedían ayuda para ubicarlo. Desde el 1 de diciembre, familiares de Ramiro Ramos Roca compartían imágenes de él, indicando que estaba desaparecido. Sin embargo, este fin de semana el fuerte olor que emanaba de la propia casa llevó a esclarecer el caso.

Pedro Castañera Huanca, suegro de Ramiro, lo había asesinado, descuartizado y enterrado, al parecer, para quedarse con el terreno donde habitabanLos sucesos se produjeron en el barrio Bicentenario, zona de la Pampa de la Isla, en una vivienda donde radicaba la familia.

Familiares y vecinos se molestaron por el olor desagradable que se sentía en una de las habitaciones. 

"Los familiares se percataron del olor nauseabundo dentro del inmueble, pero el autor del delito señaló que había un gato muerto en el lugar, intentando despistar", explicó Edson Claure, director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen.

Cuando aumentaron las sospechas, se cambió de lugar el cuerpo a un hueco más profundo. "Conociendo que en el inmueble había un pozo ciego, se trasladó el cuerpo de la víctima", dijo el jefe policial.

Al ver la tierra removida, familiares comenzaron a sospechar y optaron por excavar en la habitación del cuñado. Fue así que encontraron el cuerpo de Ramiro totalmente desmembrado.

La Unidad de Homicidios hizo el levantamiento legal del cadáver y arrestó a tres integrantes de la familia de la esposa de la víctima para fines investigativos.

Ramos Roca se ganaba la vida como carretillero en el mercado Los Pozos. Además, sumaba unos pesos extra jugando fútbol en los campeonatos de su barrio.

Castañera trató de huir aunque la policía logró aprehenderlo al poco tiempo de descubrir el cuerpo. Ante la policía, Castañera, suegro de Ramiro,  confesó el crimen. Se espera al audiencia cautelar para proseguir con las investigaciones.

Según el primer testimonio, el agresor utilizó un combo y cincel para cometer el asesinato.  Posteriormente, procedió a desmembrar y enterrar el cuerpo en la misma casa.​​​

La policía mantiene abierta la investigación para determinar si hubo participación de otros integrantes de la familia.

El autor del hecho también manifestó que las desavenencias con su yerno habrían impulsado la agresión fatal.