El monseñor instó a las autoridades de los tres niveles de gobierno a priorizar la salud con la provisión de medicamentos, oxígeno y vacunas

3 de junio de 2021, 18:10 PM
3 de junio de 2021, 18:10 PM

Por: Ximena Gutiérrez

Debido a la pandemia y por segundo año consecutivo, la iglesia católica realizó la celebración de Corpus Christi desde la catedral de Santa Cruz. La homilía que fue presidida por Monseñor Sergio Gualberti, que instó a las autoridades a priorizar los programas sanitarios e intervenir con todo el rigor de la ley para sancionar a los especuladores de medicamentos.

Este duro momento de dolor y desconcierto, demanda a las autoridades, de todos los niveles, a procurar los insumos médicos al alcance de todos, como las pruebas, el oxígeno, los medicamentos y las vacunas. De la misma manera, deben intervenir urgentemente y con todo el rigor de la ley, para detener a gente criminal que hace desaparecer medicamentos para revenderlos a precios prohibitivos en el mercado negro”, sentenció Gualberti.  

Unidos por el pan de la consolación” fue el lema escogido para la homilía, haciendo mención al tiempo en el que la sociedad vive en un estado de grave emergencia sanitaria y que la eucaristía es la que nos une en el único cuerpo de Cristo.

“El Pan de la Unidad nos llama también al perdón, a la reconciliación y la comunión en nuestros hogares, en los lugares de trabajo, en la vecindad y en el país. Nos tiene que cuestionar el hecho que, a pesar de la situación de sufrimiento y desánimo en la que estamos sumidos todos desde más de un año, persisten rencores y resentimientos pasados que nos mantienen divididos y enfrentados”, exhortó el prelado.

Una vez concluida la misa, Gualberti, junto a los obispos recorrió las calles de la capital cruceña con el Santísimo y bendijo los hogares hasta llegar al altar papal, ubicado frente al monumento al Cristo Redentor.

La caravana, también pasó por los hospitales situados en el centro de la ciudad para luego concentrarse en el atrio de la catedral, al frente de la plaza 24 de Septiembre, donde realizó la oración final para el pueblo católico.

Muchos fieles a los que encontró la procesión por la calle se arrodillaron tras el paso del Santísimo, en momentos en que el calvario de la pandemia está arañando los bolsillos y arrastrando las esperanzas de quienes han perdido el sueño aguardando por noticias de una leve mejoría de un ser querido.

Al acto asistieron autoridades departamentales y municipales para participar de la celebración a la que asistieron fieles, respetando las medidas de bioseguridad y el aforo permitido.