La mañana de este jueves, una comisión de la Policía y de la Fiscalía se trasladaron hasta el establecimiento educativo donde estudiaban los hijos de Sebastián Enrique Marset Cabrera, el ciudadano de nacionalidad uruguaya acusado de una comisión de delitos que van desde narcotráfico, legitimación de ganancias ilícita, entre otros.

Al establecimiento educativo privado, ubicado en la capital cruceña, ingresaron los efectivos de la unidad de Anticorrupción, tanto de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) como de la Fiscalía.

Según las investigaciones, los hijos de Marset fueron retirados del colegio tres días antes de que las autoridades informaran que el narcotraficante uruguayo se dio a la fuga, el pasado 29 de julio.

Los encargados del establecimiento educativo indicaron a los medios de prensa que no están involucrados ni conocen nada sobre las actividades de la familia Marset.

La comitiva indaga sobre los hijos del narco uruguayo, que tenían documentos de identidad fraguados, para saber cómo obtuvieron sus falsas identidades y cómo fue el proceso de inscripción en dicho establecimiento educativo privado.

No solo Marset tenía dos identidades falsas, sino también su esposa, sus hijos y su entorno cercano, documentos con los que hicieron una vida en Santa Cruz, sino que también hicieron sus lazos en el mundo empresarial, deportivos, eventos sociales, entre otros.