El arzobispo de Santa Cruz pide a los fieles católicos actuar ante cualquier tipo de injustica o sufrimiento de la gente

11 de septiembre de 2022, 10:28 AM
11 de septiembre de 2022, 10:28 AM

El Arzobispo de Santa Cruz, monseñor René Leigue, en su homilía de domingo desde la Basílica Menor de San Lorenzo, pidió no adormecerse ante los casos de feminicidio, injusticias, mentiras y los niños que sufren. Apeló a la misericordia de los fieles cristianos para que actúen en cualquiera de estos hechos. 

"No será que esto también nos está pasando a nosotros, adormecernos en cosas que a lo mejor vemos que no es correcto, que no es bueno, que no está bien, pero nos quedamos a veces con eso de: ¿qué vamos a hacer? Es así la realidad. ¡Qué es lo que vemos en la realidad que vivimos? Vemos tanta injusticia, tanta mentira, tanta calumnia, tanto feminicidio, tantos niños que sufren. Todo esto que vemos cada día es uno más de tantos que hay y nos estamos conformando con eso", remarcó el líder religioso. 

Asimismo, manifestó que nos tiene que preocupar todo lo que no está bien. "Nos estamos acostumbrando a que esto es normal, y si nos quedamos con eso, no sé qué va a ser al final de nosotros. (...) A veces se dice: 'esta persona antes era católica, pero ahora no sé dónde está, no sé si va a misa o adónde irá” Y nos quedamos ahí, no nos preocupamos por esa persona, ¿Será que no es parte de tu compromiso preocuparnos por el vecino o la vecina? ¿Preocuparnos también de su fe? “Esta persona antes era buena, ahora se comporta de esta manera” ¿Por qué será? Y la dejamos ahí y no nos preocupamos más", aseveró. 

En la homilía, monseñor insistió en no ver las cosas malas como algo normal.  "Si nos pasa en la familia algo que no está bien, alguna muerte por desgracia, un accidente o lo que pase, recién sentimos esa necesidad de que alguien nos faltó. El Señor me llama hoy para ser alguien también que se preocupe por los demás". 

"¿Qué tengo que hacer? El Señor me llama hoy para ser alguien también que se preocupe por los demás, así como él se preocupa por nosotros. Dios es misericordioso, Dios es Bueno y Dios no quiere que nadie falte en su familia, Dios no quiere que ni un hijo, ni una hija se pierda en el camino. Hay más alegría en el cielo por un pecador que se convierte, que por 99 que están ya convertidos", manifestó.