La escasez de personal y de recursos provoca que no se pueda hacer frente a la alta demanda de pacientes. Falta de información y empatía agudizan los contagios del Covid-19

9 de enero de 2021, 12:13 PM
9 de enero de 2021, 12:13 PM

Cuatro o cinco médicos para atender a unos 50 pacientes. Éste es el escenario habitual que se vive en los centros de salud o postas sanitarias de los distritos de la capital cruceña. Una imagen que no es nueva, pero que se potenció con la llegada de la pandemia de Covid-19.

La doctora Angelina Mendoza, del centro municipal Santa Isabel de primer nivel, zona Chacarilla, trabaja en primera línea y en el programa radial ¡Qué semana! del Grupo EL DEBER, contó el riesgo y la impotencia que significa el no contar con los recursos adecuados para enfrentar la infección.

Mendoza remarcó que la falta de personal, de camas y equipos no se algo nuevo, pero con la llegada de coronavirus se hizo más patente y aclaró que la necesidad se da tanto en el primer nivel, como en el segundo y tercero.

Mejor informados

Mendoza hizo notar que otro de los problemas es la falta de información de la ciudadanía que ante cualquier síntoma se dirige a un hospital de tercer nivel, cuando debe acudir a su centro de salud (primer nivel) y que recién el médico y de acuerdo con la patología que tenga, lo derive a un segundo o tercer nivel.

Por esta situación, la profesional indicó que muchas veces las personas derivadas a un tercer nivel no pueden ser atendidas, pues hay pacientes esperando por  un diagnóstico, cuando se hace en el primer nivel y en el tercero se trata la patología.

Sin empatía

El subestimar al virus y no tomar en cuenta las recomendaciones de los profesionales, para Mendoza es otro de los problemas que hace más difícil el trabajo, a lo que se debe sumar que hay profesionales con enfermedades de base (diabetes e hipertensión) que son retirados, pero que no se los reemplaza, lo que genera una lenta atención y una sobrecarga laboral para los médicos que quedan.

La médica recomendó a la comunidad tomar en cuenta las prevenciones, respetar las normas vigentes y subrayó que no hay camas suficientes en terapia intensiva y que en una clínica privada el costo por noche no baja de los $us 900, por lo que se debe tener mucho cuidado.

En cuanto a las cifras de contagio y muerte que se reportan cada noche, Mendoza aseguró que siente mucha tristeza e impotencia al saber que no pueden ayudar a la población, debido a que la cantidad de los pacientes supera a la de los los médicos y enfermeras.