La audiencia de reconstrucción en Las Londras duró dos horas y media. Las víctimas reconocieron plenamente a los dos detenidos y recordaron entre lágrimas los ultrajes que vivieron y que pusieron en riesgo sus vidas

6 de junio de 2022, 19:45 PM
6 de junio de 2022, 19:45 PM

A siete meses del violento secuestro a 17 personas en la propiedad Las Londras, se llevó a cabo la primera audiencia de inspección y reconstrucción, en la cual las víctimas reconocieron plenamente a los dos detenidos. Además, los testimonios ratificaron la violencia ejercida por el grupo armado contras las víctimas. 

Las víctimas se tiraron al suelo para relatar cómo fueron secuestrados por el grupo armado de Las Londras /Foto: Jorge Gutiérrez

En esta audiencia participaron los seis trabajadores de la prensa que el 28 de octubre de 2021 fueron golpeados y privados de libertad. Sin embargo, se ausentaron los ocho civiles y los tres policías que también fueron víctimas, pese a que a uno de los uniformados le rompieron una costilla en este hecho.

Fueron 150 efectivos policiales que se trasladaron hasta los predios de Las Londras para custodiar a Hebert Sixto Canaza Sacaca y Paulino Camacho Vedia, quienes salieron con permiso de la carceleta de Montero. Además de que los efectivos resguardaron a la comisión de fiscales compuesta por Wálter Cisneros, Delmy Gúzman y Osvaldo Tejerina.

La audiencia de reconstrucción e inspección ocular fue filmada por los peritos del Instituto de Investigaciones Técnico Científicas de la Universidad Policial (Iitcup) y empezó con los testimonios de los trabajadores de la prensa y las declaraciones de los acusados.

Acusados identificados

Las seis víctimas identificaron plenamente y de manera unánime a Hebert Sixto Canaza Sacaca y Paulino Camacho Vedia, como dos de los encapuchados armados que los privaron de libertad, luego de realizar disparos contra sus cámaras y contra las llantas de los vehículos en los que se transportaron.

Uno de los periodistas afectados dijo reconocer a Paulino Camacho, no solo por las filmaciones de la cámara de su colega, sino porque tiene un lunar y un tatuaje en el cuello, los cuales quedaban a la vista, pese a tener parte del rostro cubierto. Por esta razón los policías fotografiaron el tatuaje del acusado para registrarlo.

Además de que las víctimas aseguraron que Paulino Camacho se quitó la capucha cuando liberaron a los 17 secuestrados, para dar una conferencia de prensa. En ese momento también le conocieron el rostro.

Mientras que Hebert Sixto Canaza Sacaca fue reconocido por su voz y por la ropa que llevaba puesta el 28 de octubre de 2021, cuando se registró el violento secuestro. Los trabajadores de la prensa aseguraron que el acusado tenía la misma vestimenta un día después del hecho, cuando recibió al director departamental del INRA, Adalberto Rojas, en Las Londras.

Los dos acusados en primera instancia dijeron que no iban a declarar, pero luego de que fueron identificados y sindicados tuvieron que dar su versión. El primero en hablar fue Hebert Sixto Canaza, quien negó haber estado presente en el día del hecho violento en Las Londras, pero reconoció haber recibido a Rojas con guirnaldas.

Por su parte, Paulino Camacho dijo “nosotros no salimos con intensión de matar a nadie”. Similar declaración dio días después del secuestro, cuando ante los medios de prensa aseguró que, “solo querían darle un susto” a las 17 víctimas del hecho.

Otra prueba colectada

Una prueba importante para el caso fue la pestaña de la cámara de un trabajador de Unitel que fue hallada en Las Londras, siete meses después del hecho. Los peritos recogieron el accesorio y lo registraron en el cuadernillo de investigación.

Para la abogada de los afectados, Raquel Guerrero, y el presidente de la Asociación de Periodistas de Santa Cruz, Roberto Méndez, esta es una prueba contundente de la violencia que se ejerció contra las víctimas, pues la pestaña había sido arrancada por la fuerza de la cámara para evitar que el trabajador filme los hechos.

El relato de los trabajadores de la prensa se entrecortó cuando llegaron a la zona de los galpones, donde recordaron que fueron amedrentados por 300 personas armadas con palos y machetes, quienes los lanzaron al suelo y golpearon por varios minutos, producto de ello resultaron con hematomas y un policía quedó con una costilla rota.

En ese lugar, una periodista dijo que la encerraron y no la dejaron ir al baño para hacer sus necesidades. Además, de que las otras víctimas dijeron que le dieron de beber agua servidas, las cuales habían sido utilizadas para pelar pollos y lavar el cuero de antas. “Nos dijeron que, por ser buenos nos iban a invitar agua, pero nos dieron de beber aguas residuales”, lamentó uno de los afectados.

Para realizar estos relatos, las víctimas tuvieron que echarse al suelto para escenificar cuando fueron tumbados a golpes y amenazados de muerte. Por esta razón, a varios de ellos se le quebró la voz y lloraron recordando los momentos de angustia que vivieron las ocho horas que duró el secuestro.

La audiencia de reconstrucción e inspección ocular duró dos horas y media. También estuvo presente el abogado de los acusados, César Cardona, que durante la audiencia negó la participación de sus defendidos y solo pedía saber quiénes llevaron hasta Las Londras a los periodistas.