"La reina Isabel II era la abuelita de la nación", dice una boliviana que radica en Londres

Bruna Antelo, hace casi 20 años, llegó como estudiante de intercambio a la universidad de Brigthon, de Londres. Al finalizar sus estudios comenzó a trabajar en una empresa de marketing y hoy forma parte de la Fundación de Arte Contemporáneo Boliviano (Contemporary Bolivian Arts Trust), está casada con un ciudadano británico y sus dos hijos, de 14 y 17 años, nacieron en Londres.

Esta boliviana, desde Londres, comenta a EL DEBER cómo ha impactado la muerte de la Isabel II en la mayoría de los británicos. “La reina es considerada para los británicos como la abuelita de la nación. Su figura siempre ha estado ahí. En Navidad,  la familia de mi marido, después del almuerzo, con postre y café incluido, religiosamente se sentaban a escuchar el mensaje de la reina y sus deseos de Navidad”, comenta Bruna. 

El reinado de Isabel II duró 7 décadas. Fue coronada con 26 años, murió de 96 / Foto: AFP

Fue el viernes 9 de septiembre cuando el Palacio de Buckingham confirmó su deceso. Desde entonces, en la puerta principal se dejan ramos de flores y  tarjetas con mensajes de agradecimiento y admiración. “Es la única monarca que ha conocido casi el cien por ciento de la nación. Ella estuvo siete décadas a la cabeza de la monarquía, muy pocas personas (mayores) se acuerdan de su padre, pero mi suegra, que falleció hace poco, era una de ellas”, dice.

Si bien Bruna no pudo llegar hasta la residencia oficial de la monarquía, ubicada en pleno centro de Londres, el domingo estuvo en el palacio Hampton Court, un sitio turístico muy visitado donde se habilitó un espacio a un costado de su ingreso para dejar ramos flores. “Gracias majestad por todo lo que hizo. Dios bendiga al rey Carlos III". "Gracias por todo lo que hizo y por su amor”, “Nuestra amada reina, descansa en paz, gracias por todo”, son algunos de los mensajes dejados en dicho lugar junto a tiernos corazones y dibujos de niños. 

Vea su visita al Palacio Hampton Court:

Otro aspecto que destaca de la reina es que dedicó su vida entera a cumplir con su deber, es decir, servir a la nación. Y lo demostró dos días antes de morir al recibir a la nueva primera ministra británica, Liz (Elizabeth) Truss, elegida por los conservadores. “Ella seguía trabajando en la medida que le era posible, pese a su avanzada edad (96 años)", dijo. 

La monarquía británica, continua, es muy importante para el país porque trae billones de libras esterlinas (o dólares) en turismo. “La reina era el marketing”, añade.

Al ser Bruna una activista ligada al medioambiente, confía en que el rey Carlos III será un gran defensor ya que lleva años trabajando en el tema. “Estoy contenta porque veo en él un activismo feroz”, dice con entusiasmo. 

Al finalizar la entrevista, aclara que no está de acuerdo con la monarquía británica, pero que en casi dos décadas de vivir en Londres ha podido entender el amor y respeto que los británicos tienen hacia la familia real, especialmente hacia la reina Isabel II. 

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