La etapa agrícola de verano se vio afectada por el exceso de lluvia. Solo se sembraron 960.000 hectáreas de las 1.035.000 previstas. De esta extensión de cultivos, se perdieron 47.000 ha por inundaciones

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7 de mayo de 2018, 7:13 AM
7 de mayo de 2018, 7:13 AM

Mientras la cosecha de granos del periodo de verano 2017-2018 ingresa a la  etapa final, con un avance que supera el 90%, los productores del departamento empezaron la siembra de la temporada de invierno con una proyección de alcanzar 1.040.000 hectáreas (ha) en los cultivos de trigo, soya, maíz, girasol, sorgo y chía.

Excepto la soya, cuya siembra se inicia entre junio y julio, todo dependiendo del factor climático, las demás ya están en marcha desde hace dos semanas.

El gerente del Departamento Técnico y de Servicios de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Richard Trujillo Mendoza, dijo que las perspectivas de siembra para la campaña de invierno son soya 300.000 ha, trigo 111.000 ha; girasol 120.000 ha; maíz 113.000 ha; sorgo 380.000 ha y chía unas 16.000 h. 

“La intensificación de los cultivos de la nueva temporada agrícola depende de las lluvias de este mes para poder sembrar el área proyectada”, agregó.

El gerente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), Edilberto Osinaga, considera que la proyección del cultivo del sorgo registra un notable repunte con relación a 2017, que se llegó a 325.000 ha y ahora se perfila a 380.000.

El crecimiento de los cultivos de sorgo, que aumenta cada año, es considerado el efecto del manejo que hace el productor en la rotación de sus plantaciones, porque el rastrojo que deja esta gramínea le permite al agricultor hacer siembra directa de soya de verano.

Evaluación

Richard Trujillo informó que para esta campaña de verano 2017/2018 se tenía previsto una mayor área de siembra de soya (1.035.000 h), pero las condiciones climáticas no fueron las favorables en el Norte Integrado por exceso de lluvia, todo lo contrario a la de la zona este, donde se presentaron periodos de sequía en llenado de grano. Esto ocasionó la disminución considerable del rendimiento.

Al final, se sembraron 960.000 ha, se perdieron 47.000 ha y hasta el final se estima que solo se logrará cosechar aproximadamente 913.000 ha, inferior a las 993.000 ha cosechadas en el anterior verano. Con un avance de más del 90% de la cosecha de soya, se prevé una producción de 2 millones de toneladas (t), cantidad superior a  1.864.560 t del verano 2016/17.

También se observa que los productores apostaron por el cultivo de maíz, a pesar de las condiciones adversas que sufrieron por las pérdidas, debido a sequía, primero, y a torrenciales lluvias, después, sin tomar en cuenta el impacto del contrabando. Es así que en esta campaña que concluye se sembraron 128.000 ha, que sobrepasa a las 103.000 ha del verano anterior.  De sorgo se sembraron 58.000 ha (51.000 en el verano 2016/17).

Se perdieron por exceso de lluvia en la zona del norte y del este, unas 3.100 ha. Se tiene un avance de cosecha de más del 60% con un rendimiento promedio de 2,26 toneladas por hectárea, con una producción de grano de 90.000 t aproximadamente.

El gerente técnico de Anapo sostuvo que la institución de los graneleros considera que es altamente crucial que en niveles del Gobierno central “se tome la decisión política para que los productores bolivianos podamos usar transgénicos".

Es que se trata de la herramienta tecnológica que puede ayudar a mejorar los niveles de productividad, principalmente en cultivos de soya y maíz, y con ello competir en igualdad de condiciones con la producción de otros países.