Médico que agredió a su hijastro finge convulsiones; el juez lo cautela en una clínica y dispone su encierro en Palmasola

Hans Bowles no dijo una sola palabra. El médico acusado de darle golpes de puño en la cara al menor de 11 años, hijo de su pareja, fue enviado a la cárcel de Palmasola con detención preventiva por 180 días. La audiencia cautelar en la que decidió abstenerse de hablar, concluyó a las 20:00 de este sábado.

Este caso, desde que fue hecho público el miércoles, no solo ha ocupado los principales titulares de los medios en todo el país, sino que ha indignado a la ciudadanía por el nivel de violencia ejercida contra un menor de edad. 

Gracias a la denuncia de los vecinos del condominio, ubicado en Los Tusequis y donde vivía el niño con su familia, es que la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, así como la Fiscalía e investigadores de la Policía, tomaron conocimiento de las agresiones. Inmediatamente, el médico se dio a la fuga, incluso la madre del menor y la niñera, estaban con paradero desconocido.

Un día después, el jueves, Bowles se presentó a la oficina central de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv), de la avenida Santos Dumont de la capital cruceña, acompañado de dos abogados. 

Un desmayo y convulsiones

La audiencia cautelar fijada para este sábado tuvo sus altibajos. Cuando el imputado se disponía a ingresar junto a sus custodios al juzgado, cayó al piso y empezó a convulsionar, por lo que tuvo que ser derivado a la clínica Ucebol y la audiencia se pospuso.

Sin embargo, un informe médico dio cuenta de que el desmayo y las convulsiones fueron simuladas. “Al analizar sus signos vitales y examinar las mucosas y su lengua, se certifica que el paciente no presentó dicha convulsión, por lo tanto, se establece como diagnóstico crisis de ansiedad provocada por el mismo paciente que se encuentra con todos los signos vitales dentro de la normalidad”, señala el documento firmado por el cirujano Daniel Alexander Muñoz Pastor, al que tuvo acceso EL DEBER.

Ante tal situación, el juez Rodrigo Buhezo decidió instalar la audiencia cautelar en la misma clínica donde el galeno se encontraba internado.

En una camilla, conectado a sueros, con los ojos cerrados y, aparentemente, sedado -según se observa en las imágenes a las que se tuvo acceso- Bowles asistió a su comparecencia con la justicia. No dijo una sola palabra.

El juez dispuso que, mientras dura la investigación, guarde detención preventiva en la cárcel de Palmasola durante 180 días. Bowles fue dado de alta en la clínica Ucebol y trasladado a las celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia.

La denuncia de la agresión 

La noche del miércoles, los vivientes del condominio se enteraron por sus hijos que el menor no fue a dormir a su casa porque había sido sometido a una feroz golpiza por su padrastro, incluso, lo hizo rodar por las gradas provocándole serias lesiones en varias partes del cuerpo y lo echó de la casa.

El informe de la Fiscalía señala que la valoración forense determinó que el niño tenía lesiones en el rostro, producto de los golpes de puño recibidos de su agresor, por lo que le dio siete días de impedimento.

La madre en contra de su hijo

Katherine Áñez, madre del menor, en entrevista con el programa Que no me pierda de la Red Uno, acusó a su hijo de mentir y de tener "episodios de ira". Incluso, llegó a acusar a sus vecinos del condominio de haber secuestrado al menor.

"Mi hijo desapareció de mi casa sin que yo sepa, fue secuestrado por los vecinos. No entendía por qué tenía esos golpes. Los golpes que tiene mi hijo no se los provocó mi esposo", sostuvo la mujer, a tiempo de defender a su pareja aseverando que lo que hacía era reprenderlo.

Cuando fue consultada sobre el antecedente de agresión de su esposo, siendo ella la víctima, que fue sentado en la Policía, terminó aceptando que en 2018 lo denunció por maltrato familiar.