El director del Hospital de Niños afirmó que el menor se encuentra en estado terminal. Tiene una encefalopatía en curso, problemas de hipertensión y no puede alimentarse porque está vomitando constantemente

8 de junio de 2022, 17:50 PM
8 de junio de 2022, 17:50 PM

Internado en terapia intensiva y contagiado de una grave enfermedad, el menor víctima de violación múltiple, perpetrada por cuatro hermanos que eran sus vecinos en el municipio de Yapacaní, cumplió ayer tan solo 11 años de edad y tiene un pronóstico reservado.

La mamá del menor no pierde las esperanzas de que su hijo pueda sanar, pese a que los médicos le dicen lo contrario. La mañana de este miércoles, el director del Hospital de Niños de Santa Cruz, Freddy Rojas, dio un informe del estado actual del niño, el cual no fue nada alentador.

“El niño está en mal estado general, nosotros vemos que  su estado es terminal. Está con una encefalopatía en curso, tiene problemas de hipertensión sistémica, no puede alimentarse, está constantemente vomitando, probablemente hay problemas renales y en otros órganos que recién se van a investigar”, lamentó el médico.

El secretario departamental de Salud, Fernando Pacheco, en conferencia de prensa, corroboró este diagnóstico e indicó que el menor de edad está inconsciente y solo responde a estímulos.

Para esta jornada se tenía previsto realizarle una resonancia magnética para examinar el estado de sus órganos; sin embargo, la madre cuenta que se tuvo que postergar debido a que el menor presentó presión alta y esperan poder hacerle el estudio por la mañana del jueves.

“Está como un muerto mi hijo, su corazón nomás está palpitando, su presión está altísima. Lo alimentan por sonda por la nariz, pero todo lo que entra sale por la boca”, dijo la madre con la voz entrecortada.

Además de su delicado estado de salud física, la madre contó que su hijo se encuentra totalmente traumado sicológicamente. El menor no quiere desprenderse de ella por temor a sus agresores y entra en pánico cada vez que se le acerca una persona de sexo masculino.

“Tengo miedo decía cuando hablaba, no puede dormir sin mí, me pide que aunque sea duerma en el piso, no puede soltarme, tiene un temor grave por el daño que le han hecho desde el año pasado”, dijo desconsolada la madre del menor.

También contó que hace cuatro meses gasta alrededor de Bs 2.000 diarios en atención y medicamentos para su hijo, por lo que la noticia de que el Ministerio de Salud se encargará desde este miércoles de todo el tratamiento le quita una gran preocupación de encima. No obstante, ella no puede trabajar porque debe permanecer al pendiente de su hijo, motivo por el que apela a la solidaridad de las personas para que puedan ayudarle llamando al 690- 76057.