Las restricciones de bioseguridad marcaron la celebración de Domingo de Ramos, inicio de la Semana Santa. Numerosos fieles acudieron a bendecir sus ramos

28 de marzo de 2021, 9:05 AM
28 de marzo de 2021, 9:05 AM

Monseñor Sergio Gualberti, arzobispo de Santa Cruz de la Sierra, ofició la celebración de Domingo de Ramos en la catedral, festividad que da inicio a la Semana Santa con la bendición de ramos. Esta domingo, debido a las normas de bioseguridad que rigen en la ciudad, se suspendió la procesión que caracteriza este acto litúrgico.

En la homilía dominical, Gualberti destacó la Semana Santa como un tiempo entrañable en el que la Iglesia nos hace revivir los últimos días de la vida de Jesús. 

En la ceremonia se dio lectura en extenso a todos los pasajes de la pasión de Cristo. El arzobispo recalcó que  Jesús "no huye de la Pasión, la enfrenta con la fuerza del amor y la verdad".

Del mismo modo, el religioso enfatizó en las actitudes de los católicos ante el sacrificio y resurrección de Cristo. 

Gualberti invitó a los fieles a "reconocer al Señor crucificado también en las víctimas de una administración corrupta y servil de la justicia".

La  justicia manipuladora -dijo- "está sembrando rencores, enfrentamientos y divisiones, que impiden atender con urgencia la pandemia; reconciliar y pacificar la país; y reactivar la economía, superando todos juntos la crisis general que vivimos".

El pastor de la Iglesia católica también pidió a los creyentes que reconozcan el sufrimiento de Cristo en "los pobres, los marginados y todos los sufridos; en particular, reconocerlos y acogerlos en nuestros hermanos contagiados por el coronavirus necesitados como el de un Cireneo que les ayude a cargar  la cruz de la enfermedad, que ahora está rebrotando con renovada virulencia en nuestra región".

Durante la prédica dominical, Gualberti alentó a los católicos para "andar en un camino de sencillez, humildad y espíritu de servicio", y transitar hacia "un futuro de bienestar y paz a la luz de la vida nueva en Cristo Resucitado".


Monseñor Sergio Gualberti durante la celebración del Domingo de Ramos/Fotos: Juan Carlos Torrejón

La bendición de ramos se realizó al finalizar la eucaristía, en cumplimiento de las medidas de bioseguridad que la misma Iglesia había adelantado esta semana. Entre ellas, se dispone la reducción del aforo de los templos a un 30% de su capacidad

Este domingo, como ya viene siendo habitual, la catedral dispuso también sillas en el atrio para que los creyentes se puedan sumar a la celebración.

Durante la Semana Santa se han suspendido los actos que puedan provocar la aglomeración de personas. Las ceremonias serán transmitidas por los medios de comunicación, así como por redes sociales.