Este viernes se conoció un nuevo caso de malestares y dolores de estómago de cuatro estudiantes de la Unidad Educativa Zenobia Aponte, que consumieron un jugo de la Alimentación Complementaria Escolar (desayuno escolar). Los chicos fueron llevados al centro de salud El Recreo, en el Distrito Municipal 13, al suroeste de la ciudad.

Los padres de familia de los niños indicaron que los síntomas aparecieron después de haber bebido el jugo que entrega la Alcaldía.

De acuerdo con Unitel, los niños recibieron atención médica y se fueron a sus domicilios.

Desde la unidad de comunicación de la dirección municipal de Educación indicaron que se pronunciarán por la tarde.

El jueves un grupo de seis estudiantes, de otro colegio y otro distrito municipal sufrieron síntomas similares. Estos fueron relacionados con el consumo de la Alimentación Complementaria Escolar, como una supuesta intoxicación, situación que fue rechazada desde la dirección municipal de Educación. Su titular, Raúl Ascarrunz, indicó que a diario se realizan “rigurosos controles” a los productos que se entregan a los colegios.

También la Alcaldía, mediante un comunicado, señaló que se respeta la cadena de frío y que se garantiza la calidad de los productos de la Alimentación Complementaria Escolar. Del mismo modo, se comprometió a investigar las causas de los malestares de los estudiantes.

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