La población teme salir de sus casas mientras los movilizados permanecen encapuchados en el bloqueo. Controlan las calles del municipio.

3 de noviembre de 2024, 11:25 AM
3 de noviembre de 2024, 11:25 AM

La población de Mairana vive en estado incertidumbre mientras los días avanzan y los bloqueadores afines al expresidente Evo Morales, llegados de otros distritos, continúan controlando la zona. 

Las denuncias anónimas que la Policía ha recibido revelan la estrategia de los encapuchados armados, quienes el pasado 29 de octubre lograron repeler un intento de desbloqueo y tomaron como rehenes a uniformados y periodistas tras un violento enfrentamiento que dejó numerosos heridos.

Informes de inteligencia policial detallan la presencia de más de 500 encapuchados armados con dinamitas, palos y piedras. Un grupo se encuentra en el mercado campesino, cerca de las instalaciones policiales, mientras otro controla la zona del puente y el área del surtidor. 

Para mantener el control sobre la población, los bloqueadores han desplegado personas camufladas en las esquinas de las calles del pueblo, listas para alertar y movilizar a los grupos en caso de que los vecinos intenten organizarse y defenderse.

La Policía identificó a una dirigente conocida como Fabiola, quien opera desde el barrio El Carmen y es señalada como una de las principales organizadoras que informa a los bloqueadores para neutralizar a los vecinos y atacar a los uniformados.

“Estamos secuestrados, no podemos salir, no sabemos qué hacer porque estas personas, que han venido de otros lugares, controlan las calles de manera camuflada”, relató una vecina de Mairana.

Cientos de camiones parados en Mairana desde hace días. Foto: Juan Carlos Torrejón

El 2022 atacaron las casas 

La Policía registra que, en junio de 2022, grupos del MAS bloquearon Mairana, tomaron y saquearon las instalaciones policiales y quemaron motocicletas. Ante los abusos, los residentes salieron a enfrentarlos, pero los encapuchados respondieron con piedras y dinamitas, atacando viviendas y dejando heridos y secuestrados. 

“La gente ahora no quiere salir por esa amarga experiencia; están viviendo una incertidumbre total”, afirmó un policía.

La tensión ha obligado al cierre de instituciones estatales y privadas, incluyendo bancos y comercios. 

Desde el pasado 29 de octubre, la Policía, en su intento de desbloqueo, sufrió un ataque que dejó 27 uniformados y varios periodistas heridos. 14 policías y tres periodistas fueron tomados como rehenes y solo fueron liberados tras un intercambio por 14 arrestados acusados de participar en los ataques.

Hasta ahora, la Policía mantiene silencio sobre una posible intervención en Mairana para levantar el bloqueo. Mientras tanto, cientos de vehículos permanecen varados y la población sigue sin poder circular, atrapada en una situación de tensión y espera.