La institucionalidad cruceña se reunirá esta semana en una nueva Cumbre Departamental para analizar las medidas venideras en la lucha por el Censo.

10 de agosto de 2022, 9:19 AM
10 de agosto de 2022, 9:19 AM

Las calles cruceñas finalmente amanecieron despejadas después de dos días de paro marcados de entusiasmo y enfrentamientos. El comité interinstitucional convocará esta semana a una nueva cumbre para definir las nuevas medidas de presión.

El lunes y martes, 8 y 9 de agosto, las llantas y las pititas se apoderaron una vez más de las calles y avenidas principales de la capital cruceña en demanda de la realización del censo de población y vivienda en 2023; sin embargo, no fue un paro totalmente pacífico, puesto que grupos de choque encabezados por dirigentes del Movimiento Al Socialismo (MAS) salieron a despejar los puntos de bloqueo y provocar enfrentamientos.

El Plan Tres Mil fue la zona donde se registraron más conflictos, incluso después de culminar el paro continuó la violencia en esa ciudadela, tanto así que los agentes antidisturbios arrojaron gases en dos oportunidades.

En la urbe cruceña también hubo momentos de tensión. La mayoría de ellos cuando grupos de personas que acompañaban al ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño, y al concejal masista José Quiroz agredían a los vecinos en sus puntos de bloqueo. Incluso, el concejal Juan Carlos Medrano fue víctima de estos grupos en presencia de Montaño.

Un hecho que llamó la atención de la población fue el ataque a la casa del alcalde Jhonny Fernández, donde participó gente a bordo de una camioneta blanca Toyota Hilux con placa de control 3597 CXN, que posteriormente fue identificada como propiedad municipal y vista en la Secretaría de Seguridad Ciudadana. Los opositores al alcalde sospechan de que el ataque podría haber sido autoprovocado por el burgomaestre, quien abiertamente rechazó el paro e instruyó que todas las reparticiones municipales trabajen con normalidad.

Otro suceso que manchó la imagen del alcalde cruceño durante el paro fue la presencia de un grupo de jóvenes ajenos al Gobierno Municipal de Santa Cruz de la Sierra que estaba “acuartelado” en el edificio de la Alcaldía, ubicada frente a la Plaza 24 de Septiembre, y que además traían consigo paquetes de petardos, cada uno con capacidad de 12 detonaciones.

Sin embargo, la Alcaldía aclaró que los petardos se acopiaron ante amenazas de toma de instituciones en el contexto del paro interinstitucional de 48 horas. Pero, con respecto a las personas que dormían en el edificio, de las cuales se sospecha que la mayoría serían menores de edad, se limitaron a anunciar investigaciones.

Al concluir el paro, la institucionalidad cruceña se reunió en predios de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm). Allí, el gobernador Luis Fernando Camacho adelantó que se va a llamar a una nueva reunión esta semana para convocar a otra cumbre, donde se van a definir las nuevas medidas escalonadas que pueden ser paros, cabildos o marchas. "Estemos atentos y firmes", expresó.

Autoridades del Gobierno critican las movilizaciones en Santa Cruz al señalar que solo se busca desestabilizar al Gobierno en momentos en que se realizan esfuerzos para reactivar la economía. La diputada oficialista Ninoska Morales presentó la mañana del martes, en la Fiscalía, una denuncia contra el líder cívico Rómulo Calvo, el gobernador Luis Fernando Camacho y el rector Vicente Cuéllar por “vulnerar el derecho al trabajo” con el paro en demanda del censo.