Se inculpan para salir de la cárcel y la justicia indígena las sanciona

Tres mujeres de la Comunidad Ayorea Degui se declararon culpables del delito de robo en el juzgado donde se realizó la audiencia de procedimiento abreviado, al que se sometieron las féminas ayer al final del día en la casa judicial de la Villa Primero de Mayo. 

Las sentenciadas, que dijeron ser trabajadoras sexuales, estaban con detención preventiva en el penal de Palmasola hace más de ocho días, luego de que fueron aprehendidas por la Policía debido a la denuncia de un hombre, que contó que le quitaron su equipo celular cuando su motocicleta se dañó cerca del lugar donde ellas estaban. 

El juzgador Luis Esteban Loza les impuso la condena de tres años de cárcel y debido a que esta cifra no supera la cantidad de años necesarios para quedarse en el penal y cumplir su condena, las tres consiguieron su libertad gracias a un perdón judicial.

Al final de la audiencia, el juez  Loza pidió la intervención del presidente de la comunidad ayorea, Manuel Chiqueno, al que le preguntó si dentro de sus usos y costumbres originarios consideraba pertinente sancionarlas con alguna acción.

El líder ayoreo pidió que además de la sanción penal, las tres mujeres durante un año hagan la limpieza del colegio y de la iglesia de la comunidad. La determinación fue aceptada por las féminas, que tampoco podrán cambiar de domicilio, portar algún tipo de arma y no pueden consumir ningún tipo de bebidas alcohólicas.

Jessica Echeverría, abogada de las mujeres, dijo que tuvo que aceptar el juicio abreviado pese a no estar de acuerdo e indicó que hubo excesos de la Fiscalía.