Fesirmes paró este jueves en demanda de mejores condiciones de trabajo y para los pacientes. El lunes definirán nuevas medidas

18 de mayo de 2023, 19:30 PM
18 de mayo de 2023, 19:30 PM

Este jueves, mientras se realizaba una cirugía en el hospital El Bajío, la camilla en la que se encontraba una paciente, a la que se le realizaba una cesárea, se rompió. Para continuar la operación, el personal de salud tuvo que poner un toco para sostenerla. Esta es solo una de las situaciones que se viven a diario en los hospitales de Santa Cruz, según Ruth Aguilera, de la Federación de Sindicatos de Ramas Médicas de Salud Pública (Fesirmes).

Este jueves, Fesirmes llevó adelante un paro de 24 horas en demanda de mejores condiciones para los pacientes, lo que incluye infraestructura, equipamiento e insumos. Aguilera señala que se están rechazando cirugías porque no hay bisturíes para cortar ni hilos para suturar, y tampoco se permite -mediante instructiva- que los pacientes compren esos insumos que podrían usarse en las intervenciones quirúrgicas que ellos mismos necesitan.

Los problemas de infraestructura tienen que ver con techos que se caen o tienen moho, pero también con aguas servidas estancadas, que terminan contaminando el agua que corre por las tuberías y que es consumida tanto por pacientes como por el personal del centro de salud, como ocurre en el San Luis.

Aguilera contó que en ese centro de salud las aguas estuvieron estancadas por más de una semana y que, debido a que se sabía que habría una visita de un medio de comunicación, fue ordenada la limpieza. Sin embargo, la persona responsable del mantenimiento alertó que el agua que corre por los grifos está contaminada, lo que coincide con malestares estomacales que refirieron funcionarios de ese centro, que bebieron esa agua.

En otros centros de salud, el instrumento anestésico debe ser amarrado con una tela para poder usarse en una cirugía, contó Sergio Echazú, dirigente de Fesirmes, que además denuncia que, cuando hay inspecciones, el Municipio lleva medicamentos de un centro de salud a otro, para mostrar que hay, cuando en realidad no es así.

Aguilera señaló que lo mismo sucede con el hilo de sutura. Hay una cajita de hilo que recorre los hospitales, pero lo óptimo es que cada uno cuente con sus propios insumos.

“Si un concejal, si un diputado, un senador, un asambleísta, o el control social, no hacen ese trabajo de fiscalizar, alguien tiene que hacerlo. Lamentablemente otra vez tenemos que hacerlo nosotros (Fesirmes) porque -aparte de que vemos la seguridad de la ciudadanía- tengo que ver la seguridad jurídica y gremial de mis afiliados”, manifestó Echazú.

Luego argumentó: “Porque al faltar algo (insumos), puede fallecer alguien, o puede quedar con alguna consecuencia grave respecto de su enfermedad; luego el culpable es el médico de turno. Siempre quieren cortar por la parte más delgada, la soga, echar la culpa al profesional. No, esta vez no; no lo vamos a permitir”.

La mañana del próximo lunes Fesirmes tendrá un nuevo ampliado, en el que definirán nuevas medidas de presión. Una vez más esperan que el alcalde, Jhonny Fernández, acuda a reunirse con ellos. Aguilera ya perdió la cuenta de las veces que invitaron al burgomaestre a reunión con la dirigencia sindical. Tampoco se presentó a la audiencia pública que solicitaron.

Echazú señaló que nada ha cambiado desde hace dos meses, cuando hubo promesas de mejoras. Añadió que los médicos piden el cambio de la secretaria municipal de Salud, Adriana Amelunge. Indicó que requieren a un profesional que hubiera trabajado en el sistema de salud pública y que entienda cómo funciona.

El Municipio

Este jueves el alcalde sostuvo que el presupuesto aprobado para salud en 2023 es de Bs 950 millones y que, de ellos, Bs 500 millones se destinan al personal médico.

Los dirigentes del Fesirmes cuestionan que esa inversión no se ve, contrariamente a las carencias.

“Se conforma la comisión de control y fiscalización de los servicios en atención en salud para los centros de primer y segundo nivel, que son competencia del gobierno municipal. Esta comisión tendrá la facultad de controlar, fiscalizar, las compras de: medicamentos, insumos reactivos, y la atención que se presta en cada uno de los centros”, expresó el alcalde, este jueves.

Además, anunció que instalarán cámaras de vigilancia en los centros de almacenamiento de todas las compras de salud que hace el Gobierno Municipal.

Acusaciones de robo

Tanto Echazú como Aguilera mostraron su molestia por las acusaciones efectuadas por el concejal oficialista Maykol Negrette, en el sentido de que los profesionales de salud, supuestamente, se llevan o roban los medicamentos de los centros de salud. Fesirmes calificó las declaraciones de ese concejal como “temerarias y abusivas”. Anunciaron medidas penales contra ese legislador.

Es por ello por lo que decidieron no presentarse a la reunión que Fernández convocó, a través del director de Recursos Humanos, para este jueves a las 18:00.



Alcalde convocó a reunión a Fesirmes


“Por un principio de dignidad, ética y respeto a nuestros agremiados no asistiremos a su convocatoria, hasta tener las disculpas y (la) retractación pública de las declaraciones de dicho concejal”, señala la carta que el Fesirmes envió al alcalde en respuesta a su invitación.

Fesirmes envía carta al municipio para rechazar reunión

Pero no solo los médicos han quedado molestos con esas declaraciones del concejal, también las farmacéuticas y bioquímicas que trabajan en las farmacias municipales, que el viernes darán una conferencia de prensa para exigir que se les demuestre cómo es que los profesionales supuestamente esconden o hurtan medicamentos. Le dan plazo, a Negrette, hasta el próximo lunes para presentar pruebas, pues de lo contrario iniciarán medidas legales por difamación, calumnias e injurias.