Vehículos en avasallamiento a Bajo Paraguá provienen de al menos dos departamentos y siete municipios cruceños
Se quemaron más de 112 mil hectáreas este año y hasta la fecha se desmontaron casi mil. Hay cultivos, pero las autoridades no asumen responsabilidad. Una cisterna es de la Alcaldía de San Julián
Como nunca antes se incendió el área protegida municipal Bajo Paraguá, ubicada en San Ignacio de Velasco.
Este 2024, según los reportes de la Fundación para la Conservación del Bosque Seco Chiquitano (FCBC), el fuego arrasó 112 mil hectáreas, solamente en Bajo Paraguá, sin contar las áreas colindantes, 7.100 ha en el sector sur del Parque Nacional Noel Kempff Mercado, y las 5.000 ha en el Área Protegida Municipal Copaibo (Concepción).}
Adicionalmente, los lugareños y organizaciones que viven y operan en la zona denunciaron la llegada de personas de otros lugares, pero llevadas por los colonos de la zona, especialmente de San Martín y otras comunidades del distrito 7 de San Ignacio de Velasco.
En los últimos días se difundieron imágenes nocturnas y la denuncia: "Mientras la Chiquitania está llena de incendios, los avasalladores siguen desmontando dentro del área protegida Bajo Paraguá, los pillamos con las manos en la masa", denunció Manuel Petiga, uno de los habitantes del municipio ignaciano.
Asimismo, otras organizaciones hicieron llegar imágenes adicionales a EL DEBER de febrero, mayo y agosto de este año. En inspecciones encontraron a gente desmontando y habilitando viviendas. "Les dijimos que era área protegida y aseguraron que desconocían eso", contaron algunos de los guardianes de la zona, que tomaron fotos en distintos momentos.
En las fotos quedaron registros de una oruga, una cisterna con el logo del municipio de San Julián, que inicialmente se creyó era para agua, pero resultó ser para aprovisionamiento de combustible, y vehículos con placas de Vinto (Cochabamba), Oruro, Santa Cruz de la Sierra, Fernández Alonso, Montero, Cotoca, Concepción, La Guardia y Portachuelo.
A continuación, imágenes de los vehículos y personas encontrados en la zona, y según las organizaciones que operan en el Bajo Paraguá, y que aseguran avisaron que se trata de área protegida.
Demandantes
A través de una carta dirigida al Comité de Gestión de Bajo Paraguá, siete supuestas comunidades de la Subcentral Sindical Única de Trabajadores Campesinos Monteverde pidieron la desafectación de 26 mil hectáreas de esa área protegida, asegurando que serían guardianes de la zona.
Sin embargo, en las imágenes tomadas en febrero de este 2024 se captó a Edson Levi Juárez. dirigente de los Interculturales de San Julián, otra organización.
Este negó ser parte del avasallamiento, dijo que solo pasaba por ahí, de ida a pescar y cazar a Piso Firme.
Desde el grupo de guardianes del área indicaron que no fotografían a personas que solo están de paso.