La Alcaldía incorporará presupuesto en el POA 2019 para nivelar los espacios públicos para facilitar la circulación de viandantes. Los usuarios reclaman orden a la municipalidad para que despeje las veredas

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28 de junio de 2018, 4:00 AM
28 de junio de 2018, 4:00 AM

Es un verdadero calvario para el peatón circular por las veredas del segundo anillo, pese a que en las zonas norte, este y sur son bastante amplias, pues los dueños de talleres mecánicos, autoventas, tiendas y otro tipo de negocios las han usado para estacionamientos exclusivos; además de obstaculizar el libre flujo de pasajeros que deben tomar micros.

En la Alcaldía se habla de la pronta aprobación de la ley de movilidad urbana, para ello ha comenzado a hacer experimentos ciudadanos, como el que se inició hace un mes en el segundo anillo, donde los choferes de micros de la línea 72-73 han sido instruidos para alzar pasajeros solo en las paradas establecidas, lo cual está dando buenos resultados porque los usuarios han comenzado a tomar conciencia de no hacer parar en cualquier esquina o donde les sea favorable.

El secretario de Movilidad Urbana, Rolando Ribera, adelantó que en la elaboración del POA 2019, que se iniciará en septiembre, será incorporado un presupuesto para la nivelación de veredas y para la construcción de rampas para el paso de personas con capacidades diferentes y superficies podotáctiles para personas invidentes o de baja visión.

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Ocupación ilegal

Haciendo un recorrido por el segundo anillo, por sugerencia de los conductores de la línea 72-73, como Gilberto Mamani, se han detectado algunas falencias en las aceras, las que no ayudan al usuario en el momento de subir o de bajar del micro.

Lo que más resalta es la ocupación del espacio público como parqueos por parte de los dueños de negocios de baterías, de motoventas, de autoventas o de restaurantes.

“Para caminar por estas veredas debemos ir en  zigzag, esquivando los motorizados parqueados, los dueños de talleres mecánicos no tienen consideración con el peatón al trabajar en el espacio público”, manifestó Jorge Sarabia, que vive cerca y debe usar la avenida Santa Cruz (segundo anillo lado este).

Tampoco se salva la Secretaría de Recaudaciones y Gestión Catastral (SER), donde aparte de tener colmado de vehículos la vereda, los taxistas ocupan una vía de la calzada del segundo anillo,  obstruyendo doblemente la circulación de micros y trufis.

“Las trancaderas se forman a cada rato porque los taxis parados en SER parecen dueños de la calle. Es difícil tomar micro o trufi cerca de esa oficina, que es municipal y es la primera que incumple las leyes”, dijo Fernando Muñoz, usuario de SER.

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En el sector comprendido entre la avenida Grigotá y la calle Charagua, en La Ramada, las licorerías acopian productos en las aceras y los camiones repartidores también cortan la circulación por la calzada, obligando al micro vueltero a desplazarse por el carril de alta velocidad. 

“Es un peligro pasar por esta zona de La Ramada tanto porque tenemos que bajarnos a la calzada para no tropezar con los paquetes de soda o de bebidas alcohólicas, además de que los compradores no tienen consideración con los peatones”, reclamó Judith Manrique, que a diario circula por ese sector.

Al salir de la avenida Escuadrón Velasco hay una bajada natural, donde la acera construida por un negocio tiene un escalón muy alto, el cual es
difícil de sortear para un adulto mayor.

“Pasando el local de pollos Luisín, la acera está mucho más alta que la calzada, eso dificulta a los pasajeros al bajar del micro, en una ocasión una mujer mayor casi cae a la calzada delante de mi micro, por ello pido que corrijan esa dificultad”, indicó el conductor Mamani.

A pocas cuadras, un hotel construyó un jardín, pero no pensaron en el viandante, pues ahora Movilidad Urbana ha marcado una parada del micro vueltero, donde no queda espacio para que baje o suba el pasajero.

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Proyectos

A raíz de este rosario de dificultades, Rolando Ribera reveló que para la gestión 2019 serán mejoradas las aceras, recordando el trabajo hecho tiempo atrás por la Dirección del Centro y Patrimonio Histórico (Dicepahi), donde se niveló la superficie y se recuperaron espacios, colocando el mismo tipo de mosaico y superficies podotáctiles en el borde.

“A mediano plazo comenzaremos a construir el piso de las veredas del segundo y tercer anillo, las cuales deben ser para uso peatonal y no como ahora, que han sido invadidas por los comerciantes”, refirió Ribera.

El responsable de Movilidad Urbana también recordó que desde 2017 comenzó la tarea de construir las islas y refugios peatonales en los cruces. 

“En la avenida Grigotá hemos recuperado 1.200 metros cuadrados de veredas, que beneficiarán a los peatones del mercado La Ramada, y pronto se hará similar tarea en la calle 6 de Agosto de Los Pozos, cuya obra está en licitación”, añadió Ribera.

En el segundo anillo

Obstáculos
El viandante no cuenta para los negocios, talleres ni casas particulares que hacen de las veredas sus estacionamientos particulares.

Antiguo bingo Bahiti
En este sitio ha quedado un remanente de calle, luego de la construcción del segundo anillo, que es usado como parqueo, lo cual servirá para ampliar el camellón o la calzada.

Recuperación
En La Ramada han recuperado 1.200 m2 de aceras en los trabajos de readecuación.

Calle peatonal
Fue lanzada la licitación para la construcción del pasaje peatonal en la calle 6 de Agosto.