"Me decía cosas desubicadas, los halagos se convirtieron en piropos y después en obscenidades. Intentó manosearme, agarraba mis manos y quería besarme", relató la mujer que presentó una denuncia contra el director jurídico de la Alcaldía cruceña

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9 de febrero de 2022, 10:37 AM
9 de febrero de 2022, 10:37 AM

Después de que el Ministerio Público admitiera una denuncia por acoso sexual contra Ever Mérida, director jurídico de la Alcaldía de Santa Cruz de la Sierra, la víctima relató el calvario que tuvo que vivir en todo este tiempo, testimonio que fue recogido por las autoridades que investigan el caso.

La mujer dijo que todo empezó en febrero de 2019, cuando le prometieron un ingreso para tener un puesto de trabajo en la Alcaldía, pero a cambio le pidieron la suma de $us 6.000, dinero que fue entregado, pero el puesto de trabajo no se concretó.

Fue ahí que la víctima pidió la devolución de su dinero y fue derivada con el abogado Ever Mérida, quien en diferentes ocasiones le fue devolviendo porcentajes del dinero entregado y que alcanzaron en total $us 2.200 y Bs 550. 

No obstante, ante los reclamos que ella le hacía para que le devuelva el monto faltante, el hombre empezó a hacerle propuestas sexuales, que ella rechazó. Los chats con dichas propuestas sexuales han sido adjuntados como pruebas por la víctima.

"Él me empezó a devolver el dinero de a poco, pero el problema fue cuando empezó a tener más confianza. Al principio no lo noté porque se veía como una gentileza, creí que él sentía pena o lástima porque soy mamá soltera", contó la víctima.

Fue en este contexto que, según el testimonio, Mérida comenzó a hacer más preguntas, le pidió su número de teléfono y luego le enviaba mensajes de día y de noche.

"Me decía cosas desubicadas, los halagos se convirtieron en piropos y después en obscenidades. Me dijo que si me entregaba a él, me iba a dar la mitad de la deuda. Me hacía videollamadas, intentó manosearme, agarraba mis manos y quería besarme. Cuando entrábamos a su oficina, cerraba la puerta con llave, siempre hacía eso cuando yo iba sola", manifestó la mujer.

Dijo que la autoridad de la Alcaldía también la citaba en lugares públicos y al aire libre, la invitaba a tomar café de forma insistente, pese a las negativas de la denunciante.

"Estoy pasando momentos críticos porque se ve afectada mi familia, quiero una restricción y que Ever Mérida no se me acerque. Pido garantías para que no me suceda nada, ni a mí ni a mi hija", sostuvo la mujer.

Para cerrar con su declaración, señaló: "No soy un objeto sexual. El doctor Mérida tiene familia y no creo que a él le guste que su entorno pase lo mismo que yo. Tiene que respetar".

EL DEBER buscó la palabra de Mérida sobre este asunto, pero hasta el cierre de esta nota no atendió las llamadas ni los mensajes.