El trabajo, esfuerzo y perseverancia hicieron crecer a Santa Cruz y convertirla en una ciudad cosmopolita. Se debería crear un comité de planificación regional

El Deber logo
22 de octubre de 2017, 22:03 PM
22 de octubre de 2017, 22:03 PM

La historia del trabajador y empeñoso pueblo cruceño empieza con el movimiento emancipador del 24 de septiembre de 1810. El Cabildo de 1810 formó la Junta de Gobierno, compuesta por Suárez, Seoane, Salvatierra y Lemoine, que también tuvo el apoyo de Eustaquio Moldes (argentino) y Melchor Guzmán (Cochabambino) e inmediatamente se difundió a todos los partidos de Santa Cruz (Mojos, Chiquitos, Cordillera, Vallegrande y la ciudad capital) a difundir los anhelos e ideales de la patria.  

El valiente y pujante hombre de la llanura tuvo que transitar un largo camino para lograr su crecimiento y desarrollo porque nadie nos regaló nada. Los líderes de ese entonces lucharon por lograr un mejor estándar de vida de toda la población.  Ese ideal inclaudicable fue el que generó la lucha cívica y la obtención del 11% de regalías que por derecho propio nos correspondía. Hasta el 1950 Santa Cruz estaba casi olvidada del terreno político y económico con ciertas escaramuzas de participación, pero sin el debido peso en la palestra nacional; sin embargo, en 1970 la necesidad económica y solidaria hizo que se creara una estrategia institucional apoyada por varios sectores, como el Colegio de Arquitectos, la Sociedad de Ingenieros, el propio Plan Regulador y el Comité para ir avanzando hasta constituirse en la cúspide de desarrollo y progreso de la zona oriental de Bolivia.

Fue todo el pueblo cruceño en su conjunto, las instituciones y el empresariado que aportaron para crear el polo de desarrollo que hoy contamos y salir del letargo rudimentario que se evidenciaba, sobre todo en el agro. Nuestro trabajo, esfuerzo y perseverancia generó nuestros recursos e hizo crecer a Santa Cruz, hasta convertirla en una ciudad cosmopolita. Hemos aumentado en habitantes y representamos el 28% de la población del país. Aportamos con el 30% al PIB. 

Somos el mejor recaudador tributario nacional, con un 41%, contamos con el 73% de la producción bovina y aportamos con el 70% en la producción de alimentos a todo el país. En la actualidad, una de las políticas públicas centrales que deben garantizar los gobiernos de turno es la seguridad alimentaria. Por eso, se debe apoyar la producción del agro. Somos una sociedad con identidad propia que damos las luces para que haya más equidad y más unidad nacional con una visión conjunta y solidaria. 

Contamos con fábricas e industrias para producir más de 400 productos de exportación y con calidad técnica y tecnológica. Seguimos trabajando porque nunca se cierra el telón para seguir creciendo de forma ascendente y responsable. Sin embargo, tenemos que tener una estrategia para que este modelo de desarrollo sea sustentable a largo tiempo, para que las generaciones futuras tengan un estándar de vida óptimo para vivir con dignidad sin escasez de los artículos básicos de la canasta familiar. 

Tenemos que mejorar en cultura ciudadana, educación (porque al pueblo hay que educarlo y darle las herramientas para que logren superarse en la vida, pero también para no ser engañados ni esclavizados), aseo, reciclaje de la basura, en salud (porque no podemos vivir con paros y huelgas continuas), organización de mercados (ordenados y limpios), en transporte (porque las condiciones de uso son deficientes). 

El conocimiento debe ser actualizado de acuerdo al ritmo en que crece la sociedad del siglo XXI, pero también fortalecer la matriz moral para que el ser humano no se valga de artilugios para enriquecerse a través de la corrupción. La ciudad capital se está uniendo con otras poblaciones, como la Guardia, Warnes y Cotoca. 

¿Será que los municipios están preparados y planificando esta realidad a corto plazo? Debería crearse el Comité de Planificación y Desarrollo de Santa Cruz, compuesto por el rector de la Uagrm, el presidente de la Federación de Profesionales, el comandante de las Fuerzas Armadas a escala departamental, el gobernador, el alcalde, el presidente de los empresarios privados de Santa Cruz, el secretario ejecutivo de la COD, el presidente de las juntas vecinales, el director del Seduca y un representante de los pueblos originarios del oriente boliviano elegido por ellos de acuerdo con sus usos y costumbres, además de un ciudadano común. 

El comité servirá para proyectar y planificar el modelo de producción departamental, crear fuentes de empleo y disminuir la pobreza. Hemos avanzado en descentralización, autonomía, elección de alcalde y gobernador. El modelo de desarrollo cruceño tiene una aceptación de competitividad del 87% a escala latinoamericana. Esto fundamenta que somos personas con iniciativa propia para crear el sustento diario. 

Es verdad que la coparticipación tributaria ha sido buena, pero con demora en la inyección de capitales por parte de los gobiernos de turno. Es necesario el pacto fiscal para de-sarrollar armónicamente el país para que la gente no abandone su hábitat natural y crear industria con máquinas y mano de obra artesanal y calificada para que crezca el turismo en las diversas comunidades. 

El turismo genera ganancias, por eso se debería impulsar la industria sin chimenea. Somos la región más próspera y halagüeña del país. Necesitamos apoyo de los gobiernos nacionales porque somos el departamento que más crece y el que recibe mayor migración por ser ejemplo de desarrollo y progreso de Bolivia y Latinoamérica.

Tags