La presidenta de la Cámara de Diputados Gabriela Montaño conversó sobre el trabajo parlamentario, de los cambios que se proponen en el Órgano Judicial, de su partido y del liderazgo del presidente Evo Morales  

El Deber logo
2 de julio de 2017, 5:01 AM
2 de julio de 2017, 5:01 AM

La presidenta de la Cámara de Diputados conversó sobre el trabajo parlamentario, de los cambios que se proponen en el Órgano Judicial, de su partido y del liderazgo del presidente Evo Morales.

La Asamblea Legislativa está en la etapa de selección de precandidatos al Órgano Judicial y en el debate del nuevo código de sistema penal, ¿cuál es la prioridad para la Cámara de Diputados?
Para este semestre la Asamblea Legislativa Plurinacional tiene el gran reto de apostar en la transformación del Órgano Judicial y de la administración de justicia en el país. Dos de las medidas más importantes tienen que ver con el proceso de preselección de las autoridades del Órgano Judicial y en el debate y aprobación del código del sistema penal, que integra el código de procedimiento penal y el código penal. Seguramente será el código más importante y más completo que aprobaremos en toda nuestra gestión porque en el ámbito penal es donde hay más problema de retardación de justicia. Ya hemos aprobado el nuevo Código de Procedimiento Civil, un nuevo Código de Familia, así como el de Niño, Niña y Adolescente, pero este proyecto de código de sistema penal completará el cambio en la justicia que se necesita con los códigos Morales.

¿La nueva elección de magistrados ayudará a mejorar la justicia en el país?
Lo primero que tenemos que decir es que la Asamblea Legislativa está cumpliendo una atribución constitucional en el proceso de preselección y elección de magistrados al Órgano Judicial. Hay modificaciones importantes con relación al proceso de 2011 porque existe un nuevo reglamento; en 2011 no hubo una calificación cuantitativa para los postulantes al Órgano Judicial, hoy sí existe y tenemos una evaluación de méritos y a la que cualquiera puede acceder y hacer seguimiento.

Me parece importante la participación del sistema universitario porque por primera vez en la historia del país se une el ámbito académico y los miembros de la Asamblea Legislativa en una etapa de preselección de autoridades; en el pasado, en el viejo Congreso se juntaban los partidos tradicionales y se repartían los cargos por cuoteos político, pero hoy existe un proceso de preselección. Además, la población participará con un nuevo diseño electoral.



La Asamblea modificó la Ley del Régimen Electoral y los ciudadanos recibirán dos papeletas, ya no una con 126 candidatos desconocidos, como ocurrió en 2011; habrá postulaciones más claras, es decir para el Tribunal Supremo de Justicia serán cuatro candidatos por departamento, para el Tribunal Constitucional son cuatro personas por departamento, al Consejo de la Magistratura serán 10 postulantes y en el Tribunal Agroambiental, como circunscripción nacional, habrá 14 candidaturas. Además, no tendremos candidatos mudos porque se abrieron todos los candados para que los medios de comunicación tengan 45 días para mostrarlos a la población.


Para los políticos, la preocupación es que seleccionen candidatos afines al MAS para que permitan la reelección presidencial; para los ciudadanos, esta elección debe servir para mejorar la justicia. ¿A qué se apunta con este proceso?

La idea original de la Asamblea Constituyente consistía en la posibilidad de que el pueblo vote y elija a sus autoridades para que no dependieran del poder político sino del poder popular; por eso es importante que la gente participe en la elección del 3 de diciembre porque tendrá la posibilidad de fiscalizar y de reclamar a sus magistrados porque son productos de esa elección popular; el poder de esas autoridades emana del voto popular y eso es importantísimo. El otro tema es que la base fundamental para la preselección de candidatos es eminentemente meritocrático. Sin embargo, no creo que exista una única varita mágica para transformar el Órgano Judicial, se necesitan autoridades más cercanas a la gente y nuevas normativas.


Recientemente vimos a un exdiputado del MAS que asumió como juez en Yapacaní, ¿qué cambio está contemplado para los tribunales departamentales?

Cada quien direcciona su mirada donde quiere. También puedo mencionar el caso de una fiscal que fue directora jurídica de Rubén Costas en la Gobernación de Santa Cruz. Hay que separar las cosas, esa decisión depende (el caso del juez) del Consejo de la Magistratura, no tiene nada que ver con el proceso de preselección que lleva adelante la Asamblea Legislativa.


Al margen de lo que los políticos podamos plantear, la población quiere que la justicia deje de ser para quien pague más. Tiene que haber justicia para todas las personas por igual y cualquier administración de justicia elitista mantendrá la lógica del que pone, gana. Queremos un Órgano Judicial que provenga de la democracia popular, del voto de la gente y que ahí esté su poder; no en el parentesco, no del amiguismo o del cuoteo partidario.


¿Esta preselección garantiza la independencia de los magistrados?

Quien se postule sabe que enfrentará un sistema universitario-académico que verificará que se cumplan con los requisitos académicos y, finalmente, es un proceso totalmente abierto y transparente. Tengo una preocupación particular en términos de democracia, convoco a las mujeres del país a que seamos parte de la transformación del Órgano Judicial.


Hay abogadas muy preparadas y que pueden darle una cualidad distinta al Órgano Judicial y con voluntad de transformar. Si vemos las fotografías en la exCorte Suprema de Justicia o en el Tribunal Supremo de Justicia constatamos que la mayoría son hombres, de ciertas familias. Ahora buscamos que entren los más capaces.


La postergación de la preselección se produjo porque hubo pocas mujeres, ¿a qué cree que se debió?

Todavía las mujeres tenemos más dificultades que los hombres en la sociedad. No es igual para una mujer cursar una maestría, un doctorado o una especialidad; pero además creo que debemos dar señales más claras en los casos de acoso político, como el que existe actualmente en la Asamblea Departamental de Santa Cruz, donde una suplente en vez de avanzar retrocede; pero no creo que hay que tener miedo y tenemos que abrir brecha y para hacerlo en el Órgano Judicial necesitamos de la presencia femenina y saber que sin mujeres no hay Estado Plurinacional.

 

Un artículo en el código de sistema penal amplía las causales del aborto, ¿cómo se manejará el debate?
El proyecto de código implica una transformación muy profunda del sistema penal porque contempla la oralidad plena en los juicios; prevé sacar del ámbito penal las chicanas permanentes, como la suspensión de audiencias porque es algo que afecta a la gente cotidianamente. Uno de los artículos tiene que ver con el aborto y, desde mi punto de vista, lo único que hace, básicamente, es aumentar las causales porque necesitamos actualizarnos. No podemos creer que un código hecho durante la dictadura de (Hugo) Banzer siga dando respuesta a la realidad actual, cuando es posible hacer seguimiento a las causas judiciales desde un teléfono celular. En nuestro país 500 mujeres mueren al año por abortos mal practicados.

El aborto como práctica no va a desaparecer, siempre ha existido a lo largo de la humanidad, pero ¿debemos castigar a todas las mujeres aunque haya una malformación incompatible con la vida, aunque se trate de una adolescente que haya sido víctima de una violación? A nadie le gustaría llevar adelante un aborto. Deberíamos preguntarnos, ¿nos sirve de algo llevar presa a una mujer?

El MAS ha ganado elecciones en Santa Cruz, pero no ha logrado consolidar una estructura partidaria, ¿por qué?
El MAS fue la primera fuerza política en Santa Cruz en 2014, pero eso no se traduce automáticamente en ganar las elecciones departamentales o en el municipio de la ciudad capital. Considero que sí tenemos nuevos cuadros políticos, como Adriana Salvatierra que en el Senado conduce todo el proceso de preselección de candidatos.

Poco a poco hemos asentado un poder territorial y vamos de lo rural a lo urbano. En el ámbito urbano hay una estructura partidaria que probablemente es insuficiente, pero existe. En las ciudades intermedias, como Warnes y Montero, hemos ganado elecciones importantes. Creo que ha quedado muy lejos la relación tensa inicial que había en 2005 y 2006 de la ciudadanía cruceña con el MAS.

¿A qué se debe el cambio? 
En Santa Cruz siempre tuvimos una votación en torno al 30%, hubo un tercio de la población cruceña que desde el principio apostó por el MAS y al proceso de cambio. Santa Cruz en sus decisiones es muy pragmática y la gente apuesta por Evo porque percibe que existe estabilidad económica y social, con posibilidad de seguir creciendo. Sigo creyendo que existe una distancia entre la confianza que le tiene el pueblo cruceño a Evo Morales y la confianza que le tiene el pueblo cruceño al MAS como estructura partidaria. Evo se lleva una enorme tajada porque la gente  se identifica con un hombre trabajador.

¿Por qué no se concretan las obras anunciadas por el MAS en Santa Cruz?
La inversión que ha recibido Santa Cruz para la construcción de carreteras es la más grande de la historia del departamento. Por primera vez se mira hacia San Matías; estamos con la construcción de la doble vía al norte cruceño y con la conexión a la Chiquitania, así como hacia el Chaco cruceño. Lo que sí necesitamos es que esas carreteras nacionales se vean interconectadas con otras vías departamentales y eso corresponde al ámbito regional. Santa Cruz tendrá tres grandes pilares porque seguirá creciendo en el ámbito de producción de alimentos y para eso hemos invertido en la construcción de defensivos, en apoyo a la producción al pequeño y mediano productor; en el ámbito hidrocarburífero Santa Cruz ha tenido millonarias inversiones en términos de exploración y explotación, además de industrialización.

 



Este será el segundo departamento que avanzará en la inversión para la petroquímica, el primero fue Cochabamba con la planta de Bulo Bulo. Esos tres pilares (producción agropecuaria, hidrocarburos e industrialización) son el futuro de Santa Cruz. Probablemente se extrañan las obras en la capital cruceña, pero hay dos temas importantes que son la consolidación de Viru Viru Hub y el tren urbano, aunque en el último tiempo hay posiciones diferentes entre las autoridades municipales.


¿El Gobierno está analizando la construcción de Puerto Busch?

Sí, todas las opciones que estén dirigidas para que Bolivia no dependa en sus exportaciones del capricho de las autoridades chilenas son motivos de análisis. Hemos cerrado un corredor bioceánico por carretera y uno de los grandes sueños del presidente es el corredor bioceánico con tren. Evo Morales ha hecho gestiones con los países vecinos para que esto se consolide porque es fundamental para que las grandes inversiones y que Puerto Busch tenga una conexión completa.


¿Qué percepción se tiene en el legislativo con la licencia, por motivos de salud, del ministro Luis Arce?

Creo que no es ético mezclar los temas de salud de una persona con los políticos. Luis Arce ha sido un excelente operador de las decisiones política y económicas del presidente Evo Morales; es decir, en el Gobierno quien ha señalado los grandes logros en términos económicos ha sido el presidente. La nacionalización (de los hidocarburos) fue una idea del jefe de Estado, un sueño del pueblo boliviano y operado de una forma extraordinaria por el ministro Arce. Pero la población debe tener claro  que quién conduce la política económica del país es Evo Morales, quien opera, evidentemente, es el ministro de Economía.

 

 



El recién designado ministro (Mario Guillén) ha sido viceministro durante casi todos estos años, es parte de su equipo económico, tengo la certeza de que dará continuidad a todo el proceso macro y microeconómico en el país. La gente no tiene nada de qué preocuparse con el aspecto económico. Lamentamos la distancia que ha tenido que tomar Luis, pero espero que sea por un corto tiempo.


El vicepresidente ha dicho que Evo Morales será candidato en 2019, ¿la reelección será solo para el presidente o también para gobernadores y alcaldes?

Hemos planteado de la manera más transparente al país, después del congreso del MAS (16/12/2016), las cuatro vías que consideramos posibles, mostramos nuestra intención y no estamos con cartas bajo la manga. Creo que es algo que debe analizarse porque en este tiempo hemos aprendido que una buena autoridad, sea municipal, departamental o nacional, que ha cumplido con su pueblo tiene el derecho a ponerse de nuevo en la palestra política y ver si la gente vota por él, porque en última instancia serán los ciudadanos los que definan. Considero que esto también debe ser analizado en el ámbito municipal y departamental. Lejos quedaron los tiempos en el que el pueblo votaba por un kilo de azúcar o por un kilo de arroz, ahora el pueblo vota por una buena autoridad.


¿Usted aspira postularse a la Presidencia o a la Vicepresidencia?

No, no está en mis planes. El equipo que ha constituido el presidente y el vicepresidente es muy solvente en lo político, en lo económico y lo social. Son los dos mejores que tenemos adentro y en el proceso de cambio.


¿Evo Morales es insustituible?

Creo que sí. El MAS tiene una enorme capacidad colectiva, pero el liderazgo de Evo Morales es insustituible.


¿El MAS depende de Evo?

La posibilidad de mantener esta Bolivia pujante depende de Evo Morales.