La Feria Internacional del Libro de Santa Cruz concluye hoy, tras cinco jornadas en las que se puso a prueba la respuesta de la gente a un evento de estas características en tiempos de pandemia. El balance de los protagonistas es positivo

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5 de diciembre de 2020, 22:28 PM
5 de diciembre de 2020, 22:28 PM

Contra la adversidad y en medio de una crisis sanitaria global, la XXI Feria Internacional del Libro de Santa Cruz de la Sierra se desarrolló este 2020 a partir del esfuerzo de los libreros, autores y el público, que acudió a la convocatoria.

Estos esfuerzos unidos, impulsados desde la nueva gestión de Sarita Mansilla como presidenta de la Cámara Departamental del Libro de Santa Cruz, han permitido que la ciudad no se quede sin feria este año y que aproveche dos céntricos espacios, como la Casa Melchor Pinto y el Museo de la Ciudad Altillo de la calle Beni, para reunir a la población bajo medidas de bioseguridad.

La Cámara reconoció este año a la historiadora y directora del Museo de Historia Regional de Santa Cruz, Paula Peña, que recibió el Premio Anual de la Cámara Departamental del Libro.

Las actividades semipresenciales le han dado un toque especial a esta cita, que ha permitido un contacto diferente pero efectivo entre la gente a través de presentaciones de libros, conversatorios, debates, talleres y encuentros literarios.

Una de esas actividades fue la presentación del libro Escribo la A, ilustro la Z, resultado del taller de escritura e ilustración de libros infantiles del Programa Biblioteca Activa del Centro de la Cultura Plurinacional (CCP).

“Todavía extrañamos el contacto personal, pero también hemos visto la riqueza que se puede dar a través de los talleres remotos. Ha sido un aprendizaje todo este año, de prueba y error, para la gestión cultural”, señaló Paola Claros, directora del CCP.

Los encuentros literarios lograron mantener el prestigio de un evento de este nivel. El Encuentro Internacional de Narrativas, de Microficción, de Literatura Infantil y Juvenil y de Bibliotecarios, sumado al de Poesía Juvenil Jauría de palabras dieron ese realce necesario a la feria.

La VII Semana Internacional de Poesía en la Ciudad de los Anillos logró convocar a 50 poetas de 15 países y fue calificado como una gran experiencia por Gabriel Chávez Casazola, uno de los coordinadores, que también celebró los 10 años de su poemario El agua iluminada.

“La feria ha permitido dinamizar la economía de dos eslabones del mundo literario duramente golpeados por la pandemia: las editoriales y los libreros, además de los autores independientes que viven de vender sus libros. En estos días han podido generar ingresos, lo cual es muy importante. Por otra parte, los autores necesitamos una vitrina, en esta época muchos han llegado de manera virtual a los lectores, pero la cosa era cómo llegar de manera física. Por tanto, la respuesta de la población se constituye en un gran soporte”, señaló Chávez.

Finalmente, Sarita Mansilla, expresó: “La gente resurge del dolor, pero tiene muy claro que no hay un sustituto para el trabajo duro, entonces, desde el momento en que se nos presentó este desafío de asumir la presidencia siento que rompimos fronteras y nos hemos conectado al mundo. El resultado ha sido espléndido, la parte semipresencial de la feria se queda para siempre porque nos facilita poder llegar a más gente, este ha sido un ejercicio del buen comportamiento del público, que ha comprendido lo importante que es sumarse, abrir la mente, así como se abre un libro”.

La feria concluye hoy. Ambos centros culturales abren sus puertas desde 15:00 hasta las 20:00. El ingreso a todas las actividades es gratuito, con la única condición de que los asistentes lleven puesto el barbijo y que respeten las normas de bioseguridad.