Kendall es la modelo más cotizada del año

Desbancar a una supermodelo como Gisele Bündchen no es nada fácil, pero Kendall Jenner lo consiguió al establecerse por segundo año consecutivo como la maniquí mejor pagada del mundo. Puede que Kaia Gerber haya conseguido alzarse con el galardón a mejor modelo del año en los British Fashion Awards, pero, a nivel económico, las cifras demuestran que la hermana de Kim Kardashian es la más cotizada del momento. A su esbelta figura, su rostro aniñado y su talento innato hay que sumarle una serie de factores que han contribuido a que Kendall lograra triunfar de tal manera en 2018.

Selección de sus proyectos

El hecho de ser mundialmente conocida puede llegar a convertirse en un arma de doble filo, pero Kendall supo aprovechar su fama y controlar sus apariciones en la medida de lo posible, siendo muy selectiva con sus trabajos. Es cierto que hemos visto su rostro en numerosas campañas a lo largo del año, pero también es verdad que sus proyectos resultaron coherentes y se tomó las cosas con calma, por ejemplo, al no desfilar en tantos shows como otras de sus compañeras.

Un comentario que hizo hace unos meses sobre este asunto, explicando que no quería ser una de las chicas que hacía 20 desfiles en cada fashion week, le supuso una serie de enfrentamientos con varias de sus compañeras, pero reflejaba a la perfección la manera en la que estaba enfocando su carrera. En las últimas semanas de la moda estuvo bastante desaparecida e incluso acudió como invitada a varios de los espectáculos en lugar de subirse a la pasarela. Sin embargo, el que no se perdió fue el Victoria's Secret Fashion Show, que conlleva un prestigio al alcance de muy pocas.

Control de su imagen

Pertenecer a la familia más mediática de internet te abre muchas puertas, tal y como confesó Kendall en numerosas ocasiones, pero también te cierra otras tantas. Las Kardashian son conocidas mundialmente por protagonizar un reality show, algo que a ciertas marcas les puede causar rechazo al principio. Sin embargo, la modelo ha sabido encontrar el equilibrio entre las excentricidades de sus hermanas y su faceta laboral, y ha continuado participando en el programa de una manera discreta y elegante que no pusiera en duda su profesionalidad. De hecho, fusionó ambos mundos cuando protagonizó junto a Khloé, Kim, Kourtney y Kylie una famosa campaña para Calvin Klein en la que ella misma tomó varias de las imágenes.

Popularidad en redes sociales 

Hoy en día a la gran mayoría de las firmas, incluso las que comenzaron siendo escépticas en cuanto al mundo de las redes sociales, les interesa tener presencia en ellas, y contratar a alguien que supera los 100 millones de seguidores en Instagram te proporciona una visibilidad altamente cotizada. En el caso de Kendall, una cosa lleva a la otra, puesto que cuenta con fans que le siguen por su programa de televisión y otros tantos interesados en su trabajo como modelo. Sea como sea, contar con tal cantidad de personas que se interesan por ti siempre es una baza muy importante a la hora de negociar con las marcas.

Presencia en las alfombras rojas más cotizadas

De los Óscar al MET, Kendall Jenner pisó las 'red carpet' más vistas del año, siempre con looks que, para bien o para mal, provocaron miles de comentarios. Esto también contribuyó a aumentar (más si cabe) su popularidad y su prestigio, puesto que no todas las modelos tienen acceso a este tipo de eventos.

Estatus como referente de estilo

Más allá de ser un mero maniquí, Kendall se estableció como un auténtico ícono de moda y, junto a sus inseparables Bella y Gigi Hadid, ha asentado las bases de un estilo ecléctico y atrevido en el que no existe el temor a innovar. Ella combina en su día a día prendas de estética 'athleisure' totalmente informales con otras mucho más especiales, como trajes, zapatos de tacón imposibles y vestidos con escotes de infarto que configuran conjuntos que generan cientos de titulares en todo el mundo, algo que también resulta totalmente rentable para las marcas que se los regalan.