Austeridad. Hay menos reinas y los comparseros restringen sus gastos. La creatividad es la salida a la situación

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13 de enero de 2019, 4:00 AM
13 de enero de 2019, 4:00 AM

“¿Qué hacemos? tenemos que pagar los trajes de la reina, el carro alegórico, la banda y los demás gastos carnavaleros (...)”, era el tema de conversación de cuatro integrantes de la comparsa Tiluchis, en uno de los talleres donde se elaboran trajes de fantasía.

Esa charla muestra en parte la crisis que está golpeando fuerte al Carnaval cruceño. Y casi todo es por la falta de dinero, pues para carnavalear se necesita gastar.

Rodolfo Pinto, confeccionista de trajes de fantasía confirma la angustia de los comparseros.

“Vivimos una crisis fuerte. No hay mucha plata para los trajes de las reinas y los carnavaleros. Todos piden descuentos, pagan de a poco, ‘tarde, mal y nunca’. Pero tenemos que adaptarnos, pues esa es nuestra realidad”, dice el diseñador, que trabaja junto a 30 personas en su taller.

¿Qué hacer frente a esta situación? Pinto señala que en época de crisis hay que ser creativo, trabajar con lo que se tiene y adaptarse a la falta de materiales finos.

“El Carnaval no perderá su brillo y su belleza. Seguiremos creando fantasías, solo que con materiales más económicos y trajes no tan gigantescos. A veces la crisis nos obliga a reinventarnos y tenemos que enfrentar la turbulencia”, añadió el creativo.

Menos reinas

El diseñador Miguel Escalante contó que este año recibió pedidos de menos soberanas de comparsas, pues, le dijeron que los carnavaleros no pueden cubrir todas sus alegorías.

“No queda otra cosa que buscar materiales más accesibles, y en algunos casos reciclar, como las plumas ya usadas que se pueden mezclar con las nuevas, para dar volumen al traje, o reemplazar los cristales por piedras sintéticas”, explicó.

Una de las agrupaciones más grandes, Juventud Carnavalera, que reúne a más de 10 comparsas, confirmó que no tendrán soberana, pero que estarán en el corso, según Gustavo Gil.

También afecta a la peluquería

“Antes las reinas venían al salón para peinarse, maquillarse, hacerse manicure y pedicure para todos sus eventos. Ahora han disminuido las atenciones, solo vienen para las fiestas grandes. Y los comparseros, que son quienes pagan sus gastos, piden descuentos, que se les hace cuando se llega a un acuerdo, porque se las atiende varias veces”, explicó el estilista Álex Rojas.

Frente ello decidieron armar paquetes de atención, sin bajar la calidad de sus servicios, pero sí disminuyendo sus precios, añadió.

Otras visiones

Desde hace una década las comparsas femeninas se han convertido en grandes protagonistas del Carnaval. Algunas participan en las precas y casi todas en el corso.

Estas agrupaciones se quedan con los principales premios que entrega la ACCC a las comparsas por su creatividad. Pero este año, las féminas se harán extrañar.

Gina Sotelo, de la agrupación Amigas Carnavaleras, integrada por siete comparsas, dijo que este año no tendrán reina, pues no pueden cubrir los gastos. “La crisis está fuerte y debemos reducir nuestras presentaciones, aunque nunca nuestra alegría”, manifestó.

Jorge Stratis, director de la ACCC, es más optimista. Dice que los carnavaleros se adaptan a la crisis y que este año no será la excepción. En el corso habrá 250 comparsas, igual que en 2018.

“Las fiestas tendrán el mismo brillo y los tres días de mojazón serán de nuevo el escenario de confraternidad, y así se esquivará a la crisis”, comentó.