Mario Del Alcázar y Daniela Cortez. Llevan 18 meses juntos, se amaron a la distancia y se casarán el próximo año

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4 de junio de 2017, 4:00 AM
4 de junio de 2017, 4:00 AM

Convirtieron la guerra en amor. Cuando se trata de realities, parejas van, parejas vienen. Pero ellos ya llevan un año y medio juntos, una pedida de mano en vivo, vía Skype, y una promesa de boda para el 2018. 

Medio pueblo conoce la historia, porque se desarrolló desde la pantalla chica. Mario Del Alcázar y Daniela Cortez se conocieron cuando eran adversarios en el programa Esto es Guerra (EEG), de la red PAT. Ella reconoce que al principio, literalmente, ‘se odiaban’ porque eran bastante competitivos y peleaban todo el tiempo, aunque salieron de vacaciones y empezaron a buscarse en otras facetas que les permitieron conocerse mejor. Hubo química y se arreglaron. “Me gusta su carisma, en cualquier momento me hace reír. Y a él le encanta que yo sea dulce y tranquila. Creo que por eso hemos durado, él me entiende, y yo a él, no hemos tenido problemas graves. Cuando me enojo, siempre trata de arreglar todo haciéndome reír, nuestra relación es bonita, se basa en la confianza”, asegura Daniela. 
Fue tanto el fuego, que adquirió otro matiz: romance apasionado, que incluso sobrevivió cuatro meses de distancia, cuando ella dejó de ser magnífica de Pablo Manzoni y se fue a México a probar suerte como modelo de la agencia Paragón de ese país, gracias a contactos de La Belle Model Management, de la maniquí boliviana Susy Diab.

El año pasado, dos semanas antes de que ella retorne a su patria, Mario la hizo llorar, pero de felicidad, cuando le pidió por videoconferencia que sea su esposa, y le prometió que la cuidaría siempre. 
La relación retomó la modalidad ‘presencial’ desde noviembre de 2016, y ya están buscando fecha para la unión nupcial. Aseguran que los padres están contentos y de ambos, ni qué decir, por lo menos ella se divierte cambiando fotos de momentos de pareja en su WhatsApp. 

Los celos para el show 
Daniela reconoce que hay celos, pero “dentro de lo normal”, y que los malos entendidos que se cruzaron, como un video de Mario con otra chica, solo son parte del show. “No importa el trabajo que tengamos, la confianza está por encima. A él le gusta la tele y creo que seguirá muchos años más en ella; no se puede prohibir a alguien que haga lo que disfruta. Nos apoyamos mutuamente en cualquier oportunidad que surja”, dice.

La defensa de su tesis en Ingeniería Industrial y de Sistemas la trajo de vuelta a Bolivia y, aunque Daniela dice que su meta desde el principio tiene que ver con conocer otros países, poco a poco está echando raíces. Ya tiene trabajo en su carrera profesional en la empresa Saci; el tiempo corre, tocarán los preparativos de la boda y, aunque esperarán un poco para tener bebés, ya fijaron cifra: ¡cuatro! 

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