Su nombre es Nahla Jalal Ahmad Yusuf Dames Chávez, tiene 24 años y es hija de un palestino y de una boliviana. Proveniente de una familia diversa cultural - mente y numerosa (es la menor de 12 hermanos), Nahla es un ejemplo de perseverancia por la historia que guarda en la lucha por sus sueños.

La joven administradora de empresas es reconocida en nuestro medio por su trabajo como planificadora y organizadora de eventos, y a su edad ya lidera su propia empresa especializada en este sector. Sin embargo, cuenta que convertirse en una empresaria no fue fácil.

A sus 14 años, el amor por su familia y sus deseos de explorar el mundo fuera de casa la llevaron a Jordania, en el corazón de Oriente Medio. Allí fue acogida por sus parientes por parte de padre y después de tres años volvió a Bolivia. “La realidad y la cultura en la que se desenvolvían las mujeres de esa tierra no coincidían con lo que yo quería”, dijo.

“Estuve varios años en el mundo árabe. Conocí historias de mujeres que solo veía en las telenovelas. No tienen libertad para algunas cosas, no pueden trabajar ni sobresalir, tienen que estar siempre en casa. Todo era distinto a lo que soñaba. Yo que - 2 ría surgir y tener lo mío. Es por eso que decidí volver”, contó.

“En un inicio esta decisión no fue bien vista por mi familia paterna, pero pasó el tiempo y todos comprendieron cuáles eran mis prioridades. A veces se sorprenden de ver mis fotos (se refiere a que allá no podía posar con escote por ejemplo) y lo tomo con gracia”, expresó la rubia, que trabajó como estilista y vendedora de chocolates artesanales.

“En mis tiempos libres fui modelo independiente. Ahora estoy dedicada de lleno a mi familia y a mi empresa”, señaló. Pronto se enfrentará a lo que ella considera que es su mayor reto: la maternidad. En las próximas semanas dará a a luz a su primogénita, fruto de su relación con Antonio Talamás. “Debo confesar que ser mamá me sorprendió mucho y me llenó de alegría. Mi hija será mi motor”, culminó.