“Los concursos ayudan a la lucha femenina”

Tiene 26 años y se destaca por su altura y figura; aunque ella prefiere que la reconozcan por su carisma e inteligencia. Precisamente eso es lo que la boliviana Vivian Chávez deberá mostrar en el certamen Miss América Latina del Mundo, que, además de promover el turismo y la cultura latina en el mundo, también busca destacar las cualidades de la mujer más allá de la belleza física.

El concurso se realizará el 27 de septiembre en República Dominicana, donde competirá con 20 candidatas de la región.

Luchadora

Proviene de una familia humilde. Su padre falleció cuando ella tenía nueve años, por lo que su madre debió enfrentar sola la crianza de cinco hijos.

Hoy, a pesar de la tristeza y carencias, se considera una mujer fuerte, invencible. “Gracias a Dios tuve un gran ejemplo, una madre que me inculcó valores y que me enseñó a luchar con uñas y dientes para conseguir lo que uno quiere”, expresa.

Con esfuerzo estudió un técnico medio en Hotelería y Turismo y está por concluir la licenciatura en Comunicación Social.

En unos días partirá a cumplir uno de sus sueños más grandes, que es participar en un certamen de belleza internacional y, si todo sale bien, conseguir el triunfo y dedicarle la corona primeramente a su madre y al país.

“Voy a promocionar la belleza de Bolivia, pero, sobre todo, la diversidad del país y el carisma de nuestra gente, que creo que es el común denominador de toda Latinoamérica”, asegura.

También aprovechará esta palestra para promover la igualdad de género. “La mujer latina es valiente, trabajadora y está abriéndose espacio en diferentes ámbitos de la sociedad, como la economía y la política”, añade.

Los concursos

Vivian afirma que gran parte de esta lucha también se gesta desde los certámenes de belleza. “Los concursos se han convertido en una herramienta para la lucha de las mujeres, que buscan la igualdad de género y el respeto a sus decisiones”, señala.

“Quien cree que los concursos de belleza son solo para mostrar la belleza de las mujeres, está viviendo en el pasado”, puntualiza.

Pese a ello, afirma que aún hay mucho por hacer para cambiar la percepción de estos eventos, en muchos casos atribuidos al machismo. “Ese es un problema latente en gran parte de los hogares del país y Latinoamérica, y solo se puede superar con la educación de nuestros hijos”, complementa.