Mirá la transformación de Jason Momoa
De ser un modelo delgado, pasó a ser uno de los actores más deseados por su talento, carisma y su musculosa figura
Jason Momoa, actor de la película Aquaman, es el hombre perfecto por su físico, talento y carisma. Te mostramos cómo era antes de ser musculoso.
Su historia
El actor nación en Hawaii en 1979, comenzó una carrera como modelo antes de obtener papeles en la serie Baywatch Hawaii y Stargate: Atlantis.
Sus músculos que hoy luce se deben en gran medida a su personaje Khal Drogo en Juego de tronos, y sobre todo a Conan, con los que ganó los protagónicos. Aunque con esos papeles no cosechó el éxito que logró con el personaje de Aquaman de DC Comics.
Para tener ese físico se levanta a las 5 de la mañana y entrena duro. "Tengo dos hijos, así que tengo que levantarme temprano, pero me gusta”, aseguró el hawaiano, al que no le gusta demasiado nadar (curioso si tomamos en cuenta que es Aquaman). Utiliza una cinta de correr o ir al gimnasio porque no le divierte.
Fotogalería de la transformación
Seis cosas curiosas sobre él
1. Cuando comenzó su trayectoria en pantalla grande, se vio involucrado en una pelea en un bar de Los Ángeles, de donde salió la famosa cicatriz de su ceja.
2. Mide casi dos metros de altura y pesa 110 kilogramos.
3. Está casado con Lisa Bonet, ex de Lenny Kravitz, famosa por su papel en La hora de Bill Cosby y 12 años mayor que él. La pareja tiene dos hijos.
4. Le encanta la cerveza Guiness y siempre que puede disfruta de una buena pinta a pesar de que es consciente de las calorías que le aporta.
5. Le gusta tocar la guitarra y tiene una amplia colección. Es fan de grupos como Metallica o Guns and Roses y de la música en general por lo que se le puede ver habitualmente en algún concierto.
6. En 2010 creó una productora llamada ‘Pride of Gypsies’ con la que rodó una road movie mostrando otra de sus pasiones: las motos.
